Montería

Impacto de rayo en colegio de Montelíbano deja cuatro estudiantes heridos, uno en estado crítico

Cuatro estudiantes resultaron lesionados, uno en estado crítico, tras la descarga eléctrica en la cancha del colegio. Autoridades y comunidad exigen medidas de prevención ante fenómenos naturales.

Institución Educativa San Antonio María Claret, en Montelíbano.

Institución Educativa San Antonio María Claret, en Montelíbano.

Montería

Un rayo cayó en la mañana de este lunes 17 de marzo en la Institución Educativa San Antonio María Claret de Montelíbano, Córdoba, dejando a cuatro estudiantes lesionados, uno de ellos en estado crítico.

El hecho ocurrió alrededor de las 7:20 a.m., mientras los alumnos participaban en una clase de educación física en la cancha de tierra del plantel, ubicado cerca del parque ecológico sobre la variante que conduce a Puerto Libertador.

Según Hugo Benedetti, rector de la institución, el rayo impactó cerca de la cancha donde los estudiantes realizaban sus actividades. “No estaba lloviendo en ese momento, solo estaba un poco nublado. Los niños iban de regreso al salón cuando se escuchó el trueno y ocurrió lo impensable”, relató Benedetti.

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El fenómeno, descrito como un “rayo seco” por las autoridades, sorprendió a todos, ya que no hubo indicios previos de una tormenta eléctrica. “Incluso los policías que hacen guardia todas las mañanas en el colegio comentaron que no había señales de lluvia. Fue algo inesperado”, agregó el rector.

La estudiante más afectada fue Karen Juliana Pitalúa Paternina, de 11 años y cursante de séptimo grado, quien sufrió un paro cardiorrespiratorio tras la descarga eléctrica.

“La niña quedó tendida en la cancha, inconsciente. Fue trasladada de inmediato al hospital local, donde lograron reanimarla después de varios intentos. Debido a su estado crítico, fue intubada y remitida a Montería para recibir atención especializada”, explicó Benedetti.

Karen Juliana, residente del barrio Corina Uribe, se encuentra en la Clínica del IMAT, en Montería, donde su condición sigue siendo delicada. “Los médicos indicaron que sufrió un paro cardíaco debido al impacto, por lo que su recuperación podría ser lenta y compleja”, detalló el rector.

Otros menores afectados

Además de Karen Juliana, otras dos niñas de 11 años y un niño resultaron afectados. Los tres permanecen hospitalizados en el centro médico local, bajo observación por presentar síntomas como cosquilleo en el cuerpo y alteraciones en el sistema cardíaco.

“Están conscientes y aparentemente bien, pero es normal que después de un impacto eléctrico su sistema esté alterado. Se les están realizando exámenes y se espera su evolución durante el día”, agregó Benedetti.

El niño, quien inicialmente no mostró síntomas, fue llevado al hospital dos horas después del incidente, luego de quejarse de sensaciones extrañas en su cuerpo. “Los padres notaron que no se sentía bien y decidieron llevarlo al hospital como medida preventiva”, explicó el rector.

El rector también aclaró que, según expertos, el rayo no cayó directamente sobre la institución, sino a unos 100 metros de distancia. “Fue un coletazo. Si hubiera caído directamente, habríamos tenido una tragedia mayor”, afirmó.

A pesar de esto, el incidente ha generado preocupación entre padres de familia y autoridades educativas, quienes cuestionan las condiciones de infraestructura del colegio. “El plantel está muy expuesto, no tiene suficiente protección contra este tipo de fenómenos naturales”, señaló un padre de familia.

El cuerpo de bomberos y personal médico actuaron rápidamente para atender a los estudiantes afectados. Las autoridades locales han reiterado la importancia de contar con protocolos de seguridad más robustos en las instituciones educativas, especialmente en zonas propensas a tormentas eléctricas.

El rector Benedetti destacó que, aunque no se habían registrado denuncias previas sobre riesgos eléctricos en el plantel, este incidente ha motivado a la comunidad educativa a tomar acciones inmediatas. “Vamos a revisar toda la infraestructura y a trabajar en conjunto con las autoridades para implementar sistemas de protección contra rayos y tormentas eléctricas. No podemos permitir que algo así vuelva a ocurrir”, aseguró.

“Esperamos que las cosas salgan bien y que los niños se recuperen pronto. Este es un llamado de atención para que se tomen medidas concretas y se eviten situaciones similares en el futuro”, concluyó el rector.

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