Hallazgos por 314 millones de pesos encontró la contraloría en Neiva.

Uno de los posibles detrimentos patrimoniales corresponde a un funcionario, quien al parecer lleva cerca de 9 años recibiendo salarios, prestaciones sociales y hasta pago de horas extras sin cumplir con sus obligaciones y sin soportes médicos.

El detrimento corresponde a que un funcionario al parecer lleva cerca de 9 años recibiendo salarios, prestaciones sociales y hasta pago de horas extras sin cumplir con sus obligaciones y sin soportes médicos.

Un funcionario adscrito a la Secretaría de Vías e Infraestructura ha sido objeto de un informe de la Contraloría que revela irregularidades en su desempeño laboral y en los pagos que ha recibido. Durante el año 2021, este empleado no solo percibió su salario habitual, sino que también recibió un pago adicional por horas extras que suma un total de $4.054.498, correspondientes a los meses de junio, julio, agosto, septiembre y noviembre. Sin embargo, el informe indica que el funcionario no ha cumplido con su función principal desde que en 2015 se le asignara la máquina cargadora N Int. C-390, la cual ha permanecido inoperable desde entonces.

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Los pagos realizados a este funcionario, que incluyen salarios y prestaciones sociales, alcanzan la cifra de $314.616.751, lo que ha generado preocupaciones sobre un posible detrimento patrimonial para el municipio de Neiva. Ante esta situación, el Contralor Municipal, Gilberto Mateus, ha anunciado el inicio de un proceso administrativo y el traslado del caso a los entes de fiscalización. Además, se prevén procesos disciplinarios para los jefes y directivos que autorizaron estos pagos sin contar con los soportes necesarios.

El funcionario ha intentado justificar su ausencia en el trabajo alegando que padece de una incapacidad laboral de origen profesional. Sin embargo, el informe de la Contraloría contradice esta afirmación, estableciendo que, a la fecha, el trabajador no cuenta con una incapacidad reconocida por enfermedad profesional ni por accidente de trabajo permanente. Esto plantea serias dudas sobre la validez de sus justificaciones para no cumplir con sus funciones.