Milan se corona campeón de la Supercopa de Italia tras agónica remontada en el derbi ante el Inter

El Derby della Madonnina, uno de los clásicos más apasionantes del fútbol mundial, vivió una nueva página histórica al coronar al Milan como campeón de la Supercopa de Italia en el Kingdom Arena de Arabia Saudita. Los Rossoneri, que llegaban a la expectativa frente a un Inter que partía como favorito por su sólido rendimiento y dominio en enfrentamientos recientes, lograron revertir los pronósticos con un triunfo memorable. Con esta victoria, no solo igualaron a su rival de turno con ocho títulos en la historia de la Supercopa, sino que también reafirmaron su capacidad para responder en los momentos decisivos.

El Inter, que venía de una racha de triunfos destacada y de un desempeño ofensivo formidable en la Serie A, no pudo mantener su dominio en los derbis. Los Rossoneri aprovecharon sus oportunidades clave y demostraron solidez en los momentos cruciales, como ya habían hecho en septiembre de 2024, cuando cortaron la racha de victorias del Inter en los clásicos. Este título no solo representa un trofeo más para el Milan, sino también un golpe anímico a su eterno rival, consolidando su posición en la rivalidad histórica que define al fútbol italiano.

Primer tiempo del Inter

El encuentro comenzó con intensidad, con ambos equipos intentando imponer su juego. Inter tomó la iniciativa en los primeros minutos, buscando aprovechar la conexión entre Mehdi Taremi y Lautaro Martínez, quienes generaron peligro constante en el área rival. Por su parte, Milan respondió con transiciones rápidas lideradas por Theo Hernández y Álvaro Morata, aunque sin éxito en la definición.

El equilibrio del partido se mantuvo durante gran parte del primer tiempo, con aproximaciones de ambos lados que fueron neutralizadas por las defensas y los porteros. Inter estuvo cerca de abrir el marcador con un remate de Federico Dimarco, pero Mike Maignan reaccionó de manera espectacular. Mientras tanto, Milan buscaba espacios en las bandas con desbordes de Christian Pulisic, aunque sin lograr concretar.

Al minuto 46, el esfuerzo del Inter funcionó. Lautaro Martínez, tras una asistencia magistral de Taremi, definió con clase al poste derecho, dejando sin opciones a Maignan. El gol desató la euforia de los aficionados nerazzurri y permitió al Inter irse al descanso con una ventaja merecida, aunque mínima, en un partido que prometía más emociones en el complemento.

Un segundo tiempo de remontada

El segundo tiempo inició con un golpe temprano del Inter. Apenas al minuto 47, Mehdi Taremi amplió la ventaja con un disparo potente desde fuera del área que se coló junto al poste derecho. El gol parecía encaminar el partido para los locales, pero Milan reaccionó con carácter. Al minuto 52, Theo Hernández acortó distancias con un magistral cobro de tiro libre, encendiendo las esperanzas de los Rossoneri.

Con el 2-1, el Milan tomó confianza y comenzó a dominar el partido. Las incursiones de Rafael Leão y Pulisic desbordaron a la defensa del Inter, mientras que los ajustes tácticos de Sérgio Conceição dieron frutos. En el minuto 80, el empate llegó gracias a Pulisic, quien culminó un centro preciso de Hernández con un remate colocado al poste derecho. El gol silenció a la afición interista y dejó el partido abierto para un desenlace emocionante.

En los minutos finales, el Milan buscó la victoria con determinación, y su esfuerzo fue recompensado en tiempo añadido. Rafael Leão, tras un espectacular desborde, asistió a Tammy Abraham, quien selló el 3-2 definitivo con un remate certero desde el área chica. La remontada Rossonera quedará en la memoria de los aficionados como uno de los derbis más vibrantes de los últimos años, dejando al Inter desconsolado y el Milan celebrando una victoria épica coronándose campeón ante su máximo rival.