Bogotá:Concejal Forero advierte que el Plan de Ordenamiento Territorial afecta la economía

Colombia

La concejal Sandra Forero señaló que el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) actual podría poner en peligro $1.8 billones adicionales del recaudo de la ciudad, afectando los impuestos relacionados con la construcción, como el predial, el ICA y la delineación urbana. Forero advirtió que las restricciones del POT dificultan el desarrollo de nuevos proyectos, lo que perjudica la economía local.

“Este plan limita la construcción formal y, con ello, reduce los ingresos que la ciudad obtiene de impuestos”, afirmó la concejal.

Problemas específicos del POT

Durante su intervención, Forero destacó siete problemas principales que atribuye al POT, argumentando que estas medidas afectan el desarrollo urbano y favorecen la informalidad. Según ella, las exigencias del plan complican la construcción de vivienda formal, lo que podría llevar a un incremento de la pobreza. En Bogotá, más de 860 mil personas viven en condiciones precarias, de acuerdo con la concejal.

Uno de los casos que mencionó fue el de Lucía, una mujer de 28 años que vive con su familia en un cuarto de 27 metros cuadrados, sin servicios públicos ni espacios seguros para sus hijos. “Este es solo un ejemplo de cómo la falta de vivienda digna afecta la calidad de vida de los bogotanos”, sostuvo Forero.

Efectos en la construcción y en el valor de las propiedades

Otro aspecto que destacó fue el congelamiento de varias zonas urbanas, lo que, según la concejal, ha detenido el desarrollo de la capital. Las Actuaciones Estratégicas, previstas en el POT, han dejado inmovilizados 920.000 predios, valorados en $268 billones. Esto también ha generado una desvalorización en propiedades que pasaron de ser urbanas a rurales, disminuyendo su valor comercial.

Reducción en licencias de construcción y empleo

Según cifras de la Secretaría de Planeación, los metros cuadrados licenciados en Bogotá cayeron un 58% en el último año hasta junio de 2024. La concejal afirmó que esta disminución ha impactado directamente al empleo en el sector de edificaciones, con la pérdida de 14.000 puestos de trabajo en un año. Para Forero, esta situación aumenta la presión sobre el presupuesto de la ciudad, ya que más familias dependen de ayudas sociales.

Forero también cuestionó el aumento en las cargas urbanísticas, que, según dijo, han encarecido la construcción formal en Bogotá. “El POT elevó estas cargas del 0 al 15% en zonas de consolidación y del 20 al 45% en áreas de renovación urbana”, explicó.

Además, lamentó la baja oferta de vivienda de interés social (VIS) y de interés prioritario (VIP). A octubre de 2024, solo había 1.400 unidades de vivienda VIP disponibles, un número que considera insuficiente ante la alta demanda de familias vulnerables.

Inseguridad jurídica y posibles consecuencias ambientales

La concejal alertó sobre la inseguridad jurídica que, según ella, genera el POT por su exceso de reglamentación. También expresó su preocupación por las posibles consecuencias ambientales. “Aunque este POT fue promovido como una medida a favor del medio ambiente, sus restricciones pueden incentivar la construcción ilegal, aumentando la vulnerabilidad de la ciudad ante desastres naturales”, afirmó Forero.

En sus conclusiones, Forero insistió en la necesidad de revisar el POT para garantizar un desarrollo urbano que favorezca la economía y el bienestar de los ciudadanos. “Bogotá necesita políticas que impulsen la construcción de vivienda digna, generen empleo y promuevan un crecimiento económico sostenible”, concluyó la concejal.