Banco Mundial propone gravar la propiedad para reducir la brecha fiscal en América Latina
Uno de sus recientes estudios destaca que un mayor uso de impuestos a la propiedad podría aumentar los ingresos fiscales, fomentar la equidad y crear espacio para inversiones públicas en América Latina, contribuyendo al crecimiento económico.
El Banco Mundial informó que los impuestos a la propiedad como una herramienta clave para que América Latina y el Caribe puedan mejorar su capacidad fiscal y superar los obstáculos estructurales que limitan su crecimiento económico. Según el informe “Impuestos a la riqueza para la equidad y el crecimiento”, publicado recientemente, la región sigue recaudando muy poco a través de este tipo de impuestos, lo que impide que los países financien adecuadamente sus necesidades de desarrollo.
A pesar de que el 80 % de la riqueza en la región está concentrada en bienes raíces, los impuestos a la propiedad representan solo el 2 % de los ingresos tributarios totales. En comparación, en América del Norte, donde los bienes raíces componen el 47 % de la riqueza, estos impuestos generan el 12,8 % de los ingresos fiscales. El Banco Mundial estima que, si se aplicaran correctamente, los impuestos a la propiedad en América Latina podrían contribuir hasta un 3 % del PIB, incrementando significativamente los recursos disponibles para inversión pública.
Carlos Felipe Jaramillo, vicepresidente del Banco Mundial para América Latina y el Caribe, señaló que la región ha logrado avances en la gestión macroeconómica y el control de la inflación, lo que abre una ventana de oportunidad para implementar reformas estructurales como la de los impuestos a la propiedad. Estas reformas no solo aumentarían los ingresos fiscales, sino que también mejorarían la equidad al reducir la carga tributaria sobre los sectores productivos.
El informe también destaca que los impuestos a la propiedad, si se administran adecuadamente, pueden empoderar a los gobiernos locales, promover un uso más eficiente de la tierra y generar ingresos que financien proyectos de infraestructura y servicios públicos. Sin embargo, el Banco Mundial advierte que es crucial diseñar las reformas de manera progresiva para no afectar a los propietarios de bajos ingresos.
La alta concentración de riqueza en bienes raíces, combinada con la baja recaudación fiscal, plantea un desafío para la región. El Banco Mundial subraya que gravar adecuadamente la propiedad no solo ayudaría a cerrar la brecha fiscal, sino que también sería un paso hacia un crecimiento más inclusivo y sostenible.
