¿Empieza la contrarreloj para la agenda social del Gobierno en el Congreso?
Aunque ya se cumplió un mes y medio de legislatura, el ejecutivo sigue sin presentar la nueva reforma a la Salud, y la laboral tampoco ha arrancado.
Congreso
La prioridad del Gobierno Petro en esta legislatura que arrancó el 20 de julio, según han indicado distintos miembros del gabinete, es sacar adelante la totalidad de las reformas sociales, tras la aprobación de la pensional el semestre pasado.
Pese a ello, la agenda del Gobierno no ha arrancado en este nuevo periodo, pese a que se lleva ya casi un mes y medio de sesiones. La reforma laboral, aunque ya se presentó la ponencia para segundo debate, arrancaría apenas en dos semanas, y la nueva reforma a la salud sigue sin ser radicada.
Aunque aún hay margen de maniobra, en el partido de Gobierno reconocen que empiezan a ajustarse los tiempos. El representante del Pacto Histórico Heraclito Landinez declaró que “el Gobierno, a través del ministro del Interior, está conversando con las diferentes bancadas para ambientar la presentación de la reforma a la Salud. Aunque los tiempos están ajustados, tenemos tiempo suficiente para lograr la aprobación tanto en Cámara como en Senado. Confiamos en el Congreso y en los partidos de Gobierno”.
En efecto, la ‘demora’ en la radicación de la reforma a la Salud se debe básicamente a que en el Gobierno están acercándose a las distintas fuerzas políticas, para lograr consensos. Esto podría facilitar el camino, incluso permitiendo que el Gobierno la radique con mensaje de urgencia. Sin embargo, hasta que no se conozca un texto oficial y la reacción de los partidos a esa propuesta final, todo es especulación.
De otra parte, como la reforma laboral viene en trámite desde la legislatura pasada, tiene de plazo máximo el 16 de diciembre para culminar su proceso: completar los cuatro debates. Es decir, van a ser en la práctica tres meses para que supere los tres debates que le faltan y la eventual conciliación.
Más de un año lleva el Gobierno Petro queriendo sacar adelante su agenda social en el Congreso. Se ha demostrado que como son discusiones álgidas, el proceso es lento y las votaciones suelen ser divididas. La expectativa se centra en la capacidad del ejecutivo por lograr finalmente acuerdos con los distintos partidos, responsabilidad que recae naturalmente en el nuevo ministro del Interior, Juan Fernando Cristo.