Sin ‘galácticos’: Así será el recorrido de la primera etapa en la Vuelta a España
Inicia el sueño de los ciclistas colombianos con Rigoberto Urán a la cabeza en busca de una buena participacion.
Las grandes figuras del ciclismo mundial no estarán presentes en la 79.ª edición de la Vuelta que despega este sábado en Lisboa y desembarca en Madrid el 8 de septiembre, de ahí que sin “galácticos”, el pronóstico se abre a un puñado de corredores “terrenales” que lucharán por la camiseta roja, entre ellos el estadounidense Sepp Kuss, defensor del título.
No estarán en la crono inicial junto al Monasterio de los Jerónimos lisboeta los tres tenores del pelotón internacional. Pogacar descansa con el doblete Giro-Tour en el bolsillo, Vingegaard corre en Polonia persiguiendo su mejor forma, y Evenepoel, el rey de París 2024, espera el Mundial de Zurich y las clásicas de fin de temporada.
Mas, Landa y Rodríguez ante una gran oportunidad
Sí, estarán a la vista de la Torre de Bélem y a orillas del Tejo, el Tajo en Portugal, un buen número de candidatos a suceder en el palmarés a Sepp Kuus, precisamente el favorito número 1 como defensor del título, seguido de cerca, respetando sus tres entorchados, por el esloveno Primoz Roglic.
Por palmarés, el esloveno Primoz Roglic merece el respeto de un triple maillot rojo de la ronda. El excampeón olímpico de crono llega tras ganar el Dauphiné y retirarse del Tour por una caída. A Lisboa llega de la mano de la incógnita. Si aquel nivel no tan lejano, hay que contar con él para lo máximo.
Por su parte, el ecuatoriano Richard Carapaz, ganador de etapa en el Tour, optará a la cúspide del podio el frente del EF Education, donde contará con el soporte del colombiano Rigoberto Urán. En un segundo plano figura el Lidl con Ciccone, Skjelmose y Geoghegan, algunos jóvenes a seguir como Antonio Tiberi (Bahrain), y por qué no, con los españoles del Cofidis Jesús Herrada e Ion Izagirre para luchar por alguna etapa.
El ciclismo español también estará representado por dos de los equipos invitados a la ronda, el Euskaltel Euskadi y el Kern Pharma, ambos con el objetivo de buscar protagonismo en cada etapa y soñar con algún triunfo parcial.
Montaña abundante y dos cronos para una Vuelta emocionante
Lisboa, que ya dio la salida en 1997, y Madrid, se unirán como principio y final de la 79.ª edición de la Vuelta. Una crono de 12 km que se lanzará desde el Monasterio de los Jerónimos hasta Oeiras dará inicio a la aventura que tendrá un total de 3.265 kilómetros repartidos en 21 etapas, con dos jornadas de descanso.
Será la quinta vez que la ronda española sale del extranjero, añadiendo Assen (2009), Nimes (2017) y Utrecht (2022).
El menú incluye 2 contrarrelojes individuales, 1 etapa llana, 5 etapas de media montaña, 8 etapas de montaña y 5 onduladas. En total 9 de ellas terminarán en alto, lo que indica que los escaladores tendrán más opciones que nadie.
La Vuelta transitará por Portugal las dos etapas siguientes en línea, con metas en Ourém y Castelo Branco, ambas propicias para el esprint. Así, la ronda se despedirá del país vecino para acceder a territorio español.
Semana decisiva con Lagos, Picón Blanco y crono en Madrid
La última semana puede guardar múltiples sorpresas. Nada estará decidido, y esperan etapas de máximo interés. Tras el descanso en Asturias, cita con los Lagos de Covadonga en la etapa 16. La Collada Llomena y el Mirador del Fito serán los pasos previos de montaña.
Dos etapas en Santander y Maeztu (Álava), en el Parque Natural de Izki, pueden ser las más suaves dentro de una semana crucial. Y es que el fin de semana será explosivo. El último viernes etapa llana con ascenso final en el Alto de Moncalvillo, con pendientes superiores al 10 por ciento.
El sábado 7 puertos en el recorrido. El Puerto de Estacas de Trueba, el Portillo de Lunada, La Sía y el Alto de Los Tornos sumarán dureza en una jornada que tendrá su guinda final en el Picón Blanco, el juez final de la carrera. La general quedará perfilada.
Si el podio necesita alguna aclaración, la crono de 22 km entre la Ciudad de Telefónica y su sede histórica de Gran Vía 28, fijará la foto final. La Cibeles recibirá con honores al maillot rojo de la Vuelta 2024.