Vehículos eléctricos: ¿Por qué ayudan a proteger el medio ambiente?
Ante un mundo cada vez más consciente sobre el cuidado del medio ambiente y de la importancia de la sostenibilidad, los vehículos eléctricos parecen ser una opción bastante llamativa.
Los vehículos eléctricos llevan varios años buscando un espacio en el mercado, sin embargo, las dudas sobre estos autos persisten. No obstante, los productores de los modelos eléctricos afirman que son beneficiosos para el medio ambiente, ya que eliminan el uso de la gasolina.
Ante un mundo cada vez más consciente sobre el cuidado del medio ambiente y de la importancia de la sostenibilidad, los vehículos eléctricos parecen ser una opción bastante llamativa. De acuerdo a la Universidad Javeriana, los ciudadanos “buscan opciones de movilidad sostenibles con el ambiente. Algunas optan por caminar o pedalear al trabajo, pero para quienes viven lejos las alternativas se reducen al transporte público o movilizarse en vehículos eléctricos particulares.”
No obstante, el profesor de la Pontificia Universidad Javeriana y director de la Maestría en Energía y Sostenibilidad, José Reinaldo Vuelvas, cuestiona el impacto ambiental de los vehículos eléctricos, ya que si bien eliminan el uso de combustibles fósiles, la producción de las baterías implica grandes cantidades de energía y “materiales que puedan ser altamente contaminantes, como cobalto, níquel, aluminio, cobre, silicio y germanio”, explica el centro educativo.
A pesar de lo anterior, los vehículos eléctricos representan un avance significativo en la huella ambiental del transporte en el mundo.
Ahora bien, en Caracol Sostenible conversamos con Andrea Burgos, directora General de Importadores América Latina de Volvo. La experta se refirió a la apuesta que la marca está desarrollando por medio de sus vehículos eléctricos. Recientemente, tuvieron el lanzamiento de EX30. “Definitivamente, es un auto que llega para transformarnos”.
Así las cosas, Burgos destacó que Volvo ha buscado siempre destacarse por la seguridad. Sin embargo, ante un mundo cada vez más preocupado por el medio ambiente evidenciaron la necesidad de producir vehículos amigables con el medio ambiente. “Para nosotros el camino de la sustentabilidad empezó hace rato. Siempre hemos estado muy asociados con el tema de la seguridad, pero cuando hablamos de esto creemos que no podría estar completo el discurso si no ponemos al planeta.”
“A partir de ahí, hemos decidido transformar nuestro portafolio para llegar en 2025 a un 50% de ventas de autos puramente eléctricos y para el 2030 buscamos hacerlo el 100% de los autos”, agregó.
Por otra parte, Burgos detalló que la compañía reconoce que el impacto ambiental de cada vehículo depende no solo de la forma en la que se produce, sino en cómo se suministra de energía. Lo anterior, se relaciona con el impacto ambiental y la forma de producción de energía de cada país.
No obstante, explicó que la compañía hace esfuerzos para reducir su impacto ambiental. “Para nosotros la posibilidad de que un auto eléctrico sea cero emisiones depende de cuál es la fuente de energía de cada uno de los países donde estamos. Un auto no solo se maneja, también se produce, se diseña, se desarrolla y se transporta. Todo ese proceso de cadena de suministro está en nuestras manos y es en lo que trabajamos día a día para transformar y aportar en esta reducción de emisiones al planeta.”
“En cuanto a la energía de cada uno de los países, tenemos todo tipo de escenarios, países muy avanzados donde ya la generación es muy limpia y países en un proceso de transición. Pero lo que nosotros vemos desde el lado de Volvo es que es un camino y una conversación que ya empezó y que esperamos ver acelerarse en los siguientes años”, agregó
Asimismo, se refirió al tema de las baterías. La experta reconoció que es un tema polémico, pero que es una preocupación de la compañía. “Es un tema que está sobre la mesa y para nosotros eso es esencial. Todos los autos tienen un ciclo de vida útil, por esto, nuestros autos cuentan con un estudio de ciclo de vida. Lo hacemos con una base de 200.000 km y analizamos todos los parámetros de consumo y de contaminación alrededor de cada uno de los autos que fabricamos“
Reconoció que hay retos importantes y uno de ellos es tema de las baterías. Para solucionar el impacto han considerado alianzas con otras compañías que puedan usar las baterías cuando ya no sean útiles en los vehículos. “Para cada uno de esos retos buscamos poner soluciones y son discusiones vigentes. Para nosotros la batería en el auto tiene una exigencia energética alta, es decir que cuando deje de ser útil en un auto tiene todavía una vida útil. Por eso estamos trabajando con diferentes compañías a nivel mundial para utilizar esas mismas baterías para, por ejemplo, hacer lugares de almacenamiento de energía solar y suministrar energía eléctrica a través de paneles”
