Tras 32 horas de búsqueda, familiares de Diego Estrada, lo hallaron con sus propias manos
Junto con su cadáver también fue identificada, Milena Olaya, hija de los dueños de la vivienda en la que más de 50 personas se refugiaban de la lluvia cuando ocurrió la emergencia.
Antioquia
Con el paso de las horas, algunos familiares en medio de su angustia decidieron, contra la recomendación de los organismos de socorro, meterse entre la tierra y ayudar de manera empírica e improvisada a las labores de búsqueda de los cadáveres.
Tres de ellos fueron los familiares de Diego Estrada, quiénes desde primeras horas del pasado sábado, 12 horas después de la tragedia, decidieron concentrar sus esfuerzos en la parte más baja del deslizamiento, casi lindando con el río Claro.
“Estamos desde el sábado en la madrugada acá en el punto, escarbando y tratando de hacer lo que las máquinas no han podido, de momento por ahí como que se decidieron a ingresar maquinaria pesada, hasta acá abajo donde están las víctimas y nosotros estamos luchando, con fe de poder encontrar al menos el cuerpo, nuestro instinto de ser humano nos dice que él está en este punto, además aquí mismo encontramos a una persona que estaba viajando con el primo de nosotros, entonces de pronto creemos que está por acá por estos lados”, le narró a Caracol Radio John Alexander Foronda, primo de Diego.
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Treinta y dos horas después ese instinto, del que nunca dudaron les rindió los frutos a esa fe y esfuerzo. Ahí en donde decidieron cavar, sin desistir un solo minuto, apareció su ser querido.
“Algo nos decía que él estaba ahí en ese punto e insistimos, insistimos hasta que lo logramos gracias a Dios, logramos recuperar el cuerpo. La verdad es que sí se descansa y la tranquilidad de toda la familia porque ellos están allá esperando a que nosotros les digamos lo encontramos”, le comentó a Caracol Radio el señor Foronda luego de que hallaron el cadáver.
Unos metros más arriba, familiares y amigos de Milena Olaya, hija de la señora Rocio Mazo y su esposo Alberto Olaya, quienes de manera desinteresada y altruista habían prestado su vivienda, tal y como siempre lo hacían para que decenas de personas se refugiaran de la lluvia, seguían los pasos de la familia Foronda.
“Hay mucha ayuda de todos los municipios del suroeste antioqueño, de Medellín, pero es que el lugar está muy grande, está muy difícil de buscar, o sea, no es que uno pierda la esperanza, pero no sé, no sé hasta dónde seguir, vamos a ver qué pasa”, expresó la señora Stella Mazo, minutos antes de encontrar los restos de su sobrina.
Sobre las cinco y treinta de la tarde, un cadáver más fue hallado sin identificar por los familiares que mantienen en vilo en el terreno, por lo que se dispuso que fuese trasladado a la sede de Medicina legal a Chocó, para las labores de inspección.