Conocimientos ancestrales ayudaron a rescatar a los cuatro niños en la selva del Guaviare
La hora de la selva, los frutos y la conexión con la “Pacha mama” fueron algunos de los conocimientos que le permitieron a una niña indígena de 13 años mantener con vida a sus tres hermanos durante 40 días
JUDICIAL
Los cuatro niños rescatados, después de estar deambulando 40 días en la selva, continúan su recuperación en el Hospital Militar en Bogotá. El pasado domingo 11 de junio, el comandante de las Fuerzas Militares, el general Helder Giraldo y una comitiva de militares los visitaron y recibieron de parte de los niños un dibujo en el que recuerdan a Wilson, el perrito rescatista que está extraviado a quien siguen buscando.
El Ejército Nacional ha reconocido que parte fundamental de la búsqueda de los cuatro niños fue la combinación de los saberes ancestrales con las técnicas militares. En Caracol Radio hablamos con una “sabedora” para conocer un poco más de cómo funcionaron esas técnicas ancestrales y qué tanto influyeron en la búsqueda de estos cuatro niños.
EL CONOCIMIENTO ANCESTRAL
Pastora Tarapues es miembro del resguardo indígena del Gran Cumbal de la Etnia Pasto y es una sabedora de su comunidad. Comentó que, se les llama “sabedoras” porque son las autoridades portadoras de conocimiento en sus comunidades indígenas y se refirió a esa relación con la “pacha mama” y la conexión con la naturaleza que tuvo Lesly Mucutuy, la niña de 13 años, que durante más de un mes logró mantener con vida a sus tres hermanos en medio de la selva.
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Se consultó por la hora de la selva y qué tanto influyó para la ubicación de los niños. Estos cuatro menores sobrevivieron comiendo la fariña que el ICBF y las FF.MM., les arrojaron desde helicópteros, pero, cuando esa ración se les acabó, comieron pepas, es decir, frutos. Por ejemplo, una fruta conocida como soco.
Subsistencia en la selva
Y hablando de espiritualidad, hace unas semanas se hablaba que un duende y otros espíritus de la selva llevaban a los niños alrededor de la selva. Esa situación incluso generó algo de burlas, pero resulta que, al interior de las comunidades indígenas ese asunto es una tradición y una creencia.
Los cuatro niños se recuperan en el Hospital Militar, por supuesto con medicina científica para estabilizarlos, sin embargo, las comunidades indígenas están solicitando permisos para realizar sus procesos de sanación con medicina ancestral.
