El aseo y la higiene a lo largo de la historia: ¿cuál es la situación actual?
La cultura ha forjado fuertes creencias sobre la higiene y la salud que hacen del baño una experiencia única en cada país.
El aseo y la higiene son aspectos fundamentales en nuestra sociedad, y su importancia se remonta a tiempos antiguos. Aunque a menudo se asocian con imágenes de suciedad y descuido, hay mucho más detrás de esta práctica. El aseo no ha sido siempre realizado de la misma manera, ya que los recursos disponibles han variado a lo largo del tiempo. Además, la percepción y dedicación al aseo han evolucionado junto con nuestra comprensión del tiempo.
Le puede interesar
Según Francisco José Moreno-Martínez, Carmen Isabel Gómez García y Ana María Hernández-Susarte, doctores en enfermería pediátrica y en pedagogía, la palabra “higiene” está estrechamente relacionada con la salud y tiene sus raíces en la antigua Grecia. Proviene del término griego ‘hygiés’, que significa “sano”. También está vinculada a ‘Hygieia’, el nombre de la diosa griega de la salud, hija de Asclepio, quien, según la mitología, enseñó la medicina a los seres humanos.
Incluso en la antigua Grecia, ya existían baños públicos, siguiendo el ejemplo de los orientales, quienes fueron los primeros en construir edificios públicos para el aseo íntimo. La medicina griega se centraba en la higiene personal, basada en la teoría humoral. A lo largo de los siglos, el aseo ha ido adaptándose a las circunstancias de cada época, tanto positivas como negativas. En la actualidad, persisten muchos mitos en torno a esta práctica, los cuales a menudo estigmatizan a diferentes grupos sociales. Más allá de estos estereotipos, resulta interesante analizar qué países se implican más en el cuidado de la higiene.
Una nueva estrategia
La periodista Olga Khazán explicaba en un artículo de The Atlantic que la forma en que entendemos el acto de asearnos en la actualidad está relacionada con un fenómeno del siglo XIX conocido como “un truco sucio”. En esa época, surgió una nueva clase social: los trabajadores, quienes pasaron a ser grandes masas laborales encerradas en fábricas durante largas horas rodeados de contaminación. A raíz de este modelo de trabajo, posteriormente se desarrolló el modelo de oficina, que se caracteriza por ser un espacio cerrado. Para impulsar la venta de productos, la industria publicitaria tuvo que crear enfermedades pseudocientíficas, como el “mal aliento” y el “olor corporal”.
Recientemente, un usuario de Twitter llamado @xruiztru compartió un gráfico en el que se muestra el porcentaje de personas que se duchan diariamente en diferentes países europeos. Esto generó un debate en las redes sociales sobre la higiene y reveló la falta de unanimidad en este tema. Sin embargo, es importante tener en cuenta que resulta difícil generalizar las prácticas de higiene de toda una población basándose en datos concretos.
El gráfico en cuestión pertenece a un estudio publicado en 2021 por la cuenta especializada en estadística @TheGlobal_Index en la misma red social. Según este estudio, más del 95% de la población italiana se ducha a diario, lo que la convierte en el país más pulcro de Europa. Detrás de Italia se encuentran Portugal (con un porcentaje de entre el 95% y el 94%), España y Grecia (con porcentajes entre el 75% y el 84%). El resto de países europeos presentan porcentajes inferiores al 65% de su población que se ducha diariamente.
El lavado de manos
Durante la pandemia, se ha destacado la importancia de mantener las manos limpias. Antes de la crisis sanitaria, una encuesta mundial realizada por Gallup en 2015 preguntó a los participantes si se lavaban las manos automáticamente con agua y jabón después de ir al baño. Los resultados mostraron que los bosnios eran los más limpios, con un 96% de personas que afirmaron hacerlo, seguidos por los turcos, con un 94%. Es importante tener en cuenta que en países como Bosnia y Turquía, estas altas puntuaciones pueden estar influenciadas por el wudu, un procedimiento islámico de purificación ritual que incluye lavarse las manos, la boca, las fosas nasales, los brazos, la cabeza y los pies antes de la oración.
En el extremo inferior de la tabla se encuentran países como Austria (65%), Francia (62%), España (61%), Bélgica (60%) e Italia (57%). Los holandeses presentaron el porcentaje más bajo. Los datos de The Global Index también arrojan resultados desfavorables para los holandeses en comparación con otros países, aunque la posición de otros países puede variar dependiendo de qué parte del cuerpo se estudie.
Otros países en el mundo
Una encuesta realizada por la agencia de análisis de tendencias Euromonitor revela que los brasileños son considerados los más pulcros del planeta, ya que se duchan en promedio hasta 12 veces por semana, casi dos veces al día. Les siguen los colombianos (10 veces por semana) y los australianos (8 veces por semana). En el otro extremo de la escala se encuentra China, donde la mayoría de los encuestados afirmaron que se duchaban solo una vez cada dos días.
Sin embargo, la ciencia más reciente ha arrojado nuevos hallazgos que cuestionan la necesidad de ducharse todos los días. Un estudio de Harvard realizado en 2021 señaló que el jabón puede eliminar bacterias beneficiosas que protegen nuestro cuerpo de bacterias no amigables. Sin embargo, como se ha mencionado en otro artículo, ducharse con agua caliente o templada puede reducir las inflamaciones y aumentar los niveles de óxido nítrico en la sangre, lo que ayuda a disminuir la presión arterial.