Independiente Medellín venció al Deportivo Cali de la mano de Diber Cambindo
El atacante marcó un doblete en la victoria 3-0 del Poderoso en el Atanasio Girardot.
Independiente Medellín volvió a la victoria este miércoles, luego de vencer 3-0 al Deportivo Cali en duelo válido por la fecha 13 de la liga colombiana.
El cuadro antioqueño puso fin a una sequía de tres duelos sin ganar y con 16 unidades se acercó al lote de ocho primeros; entretanto, los azucareros cada vez se hunden más y penan por el descenso.
Solo del DIM en la primera parte
A pesar de que el inicio fue todo para el duelo de casa, la primera gran aporximación llegó en favor del conjunto verdiblanco. Un pase atrás de Víctor Moreno complicó a Luis Erney Vásquez, quien al rechazar por poco hace que el balón rebote en Gustavo Adrián Ramírez y se meta en su arco.
El que no falló fue Diber Cambindo, de brillante noche. A los 26′, el goleador recibió una brillante habilitación de Miguel Monsalve y dentro del área la picó, ante el achique tardío de Kevin Dawson.
Y 7 minutos después, el atacante selló su doblete. Recibió en tres cuartos de cancha, condujo con total libertad y al borde del área soltó un remate rasante que se ajustó contra el palo derecho. Gran anotación para poner a delirar al Atanasio Girardot.
Incluso Cambindo pudo sellar su tripleta al 38′, cuando ganó en velocidad por sector derecho, eludió a Dawson y con un remate forzado estrelló el balón en el poste.
Monsalve lo convirtió en goleada
Para la segunda parte, el DIM no tardó en sellar la historia. Sobre los 60′, Luciano Pons levantó un centro a media altura desde la derecha y Aldair Gutiérrez, intentando rechazar, estrelló el balón en el palo. Monsalve, muy atento, aprovechó el rebote para sellar el 3-0.
Alegría que pudo ser efímera, luego de que el juez Vergara diera varios minutos de espera mientras el VAR revisaba un posible fuera de lugar del atacante de la Selección Colombia Sub-20. Al final todo fue lícito y el tanto subió al marcador.
A partir de allí, la intensidad bajó por completo. El dueño de casa buscó darle trámite al duelo a partir de la posesión, mientras que la visita casi que bajó las manos ante la superioridad rival y su incapacidad para generar peligro.