Comenzaron los cuartos de final de la Champions League. En el duelo de ida, el Manchester City de Pep Guardiola se floreó en el Etihad Stadium frente al Bayern Múnich.

Entrentenido duelo en el Etihad Stadium. Los ingleses dieron cátedra de juego ofensivo y se impusieron 3-0, resultado que deja encaminada la eliminatoria a su favor. De no ser por Sommer, el resultado hubiese sido histórico.

El City salió a devorarse a su rival

Desde sus primeros instantes, el dueño de casa mostró una faceta totalmente soberbia: posesión, intesidad, presión alta. Quería añadirle el poderío físico a su buen trato al balón.

Haaland, el arma primordial de Pep Guardiola, avisó a los 4 minutos con un soberbio remate lejano que se fue apenas por encima del travesaño. De a poco Grealish, Bernardo Silva y Gundogan se hacían con los hilos del encuentro.

Respondió la visita al minuto 10 con zurdazo sensacional de Davies que salió apenas desviado. Con ello, el Bayern mostró que podía hacer daño a partir de sus rápidas transiciones por las bandas.

Al cuarto de hora llegaría la primera gran oportunidad del encuentro. Sommer se complicó dentro del área al intentar salir jugando, Haaland lo presionó, punteó la bola y el balón se fue apenas desviado del pórtico. Era uno de los bloopers de la temporada...

El duelo entre el atacante noruego y el guardameta suizo fue acrecentándose. Al 21′, el del Bayern le ganó nuevamente el duelo al encajonar un remate fortísimo dentro del área.

La perla del día

Fue tanto el empuje del dueño de casa que era inevitable presenciar la apertura del marcador. Previo a la media hora de encuentro, al 27′, Rodri recibió al borde del área, se acomdó y con su pierna menos hábil acomodó el balón en el ángulo. Espectacular anotación.

No cesó la supremacía inglesa

Siete minutos después del tanto, Sommer protagonizó una atajada espectacular. Al intentar cortar un centro, terminó siendo derribado. Gundogan quiso capitalizar el rebote con un derechazo a quemarropa, pero el suizo, a puro reflejo, salvó con sus pies.

No respondió el elenco alemán sino hasta la adición, cuando Sané, un viejo conocido del Etihad, soltó un zapatazo de media distacia que rozó el palo derecho de Ederson.

Reacción visitante

Para la segunda parte, el entrenador Tuchel, reciénm llegado a la instituación bavara, le dio un impulso a su equipo a partir del juego directo y dejando un poco de lado la seguridad defensiva.

Sané se convirtió en su as de espadas: al 46′ un remate exigido por poco complica al arquero rival, al 48′ no pudo definir un claro mano a mano ante la brillante intervención de Ederson y al 53′ otra disparo de media distancia que no pasó a mayores. Estaba cerca la ley del ex.

Tras el acoso alemán, el City reaccionó y tornó el duelo de ida y vuelta. Sumas emociones en apenas unos instantes. Ake impidió un tanto de Kevin De Bruyen al recibir el remate del belga en su rostro e instantes después sacó un derechazo dentro del área que Sommer salvó.

Pausa y nocaut del City

Ante el fogoso inicio, las acciones fueron mermando y se vivió un corto periodo de calma. Instante en el que los entrenadores aprovecharon para realizar sustituciones y con ello refrescar sus nóminas.

La pasividad duró hasta el 70′, gracias a un grosero error en salida visitante. Upamecano intentó salir jugando y perdió la bola en zona caliente. Haaland, acostumbrado a marcar goles por montón, se visitó de asistidor y con un centro preciso al segundo palo habilitó a Bernardo, quien definió de cabeza.

Julián Álvarez, que recién había ingresado al campo, tuvo el tercero con un remate a colocar que Sommer, la absoluta figura del encuentro, evacuó al tiro de esquina.

El que no falló instantes después fue Haaland, la joya noruega no podá irse sin su tanto. Stones recibió un balón profundo al segundo palo y de cabeza se la bajó al goleador para que definiera a placer. Goleada y tiquete casi listo a semifinales.

Sommer impidió una humillación

A pesar de los tres goles de ventaja, el City fue por más, pero se topó con un Sommer heroico. Primero le arrebató un mano a mano a Haaland, después siguió de cerca un tiro envenenado de Álvarez y al final evacuó un cabezazo de Rodri.

Victoria 3-0 del Manchester City para encarrilar el pase a la siguiente ronda de la Champions League. Guardiola sueña en grande con una nueva ‘orejona’.