Disidencias Farc, supuestas clientes de red de tráfico de armas en el Ejército
La investigación está en manos de la Fiscalía General. Habrían vendido material bélico por más de $1.330 millones.
Bogotá D.C.
Caracol Radio conoció que una red trasnacional de tráfico de armas en el Ejército Nacional habría estado al servicio de las disidencias FARC, principalmente con la venta de granadas y municiones que superaría los 1.330 millones de pesos.
La operación de contrainteligencia se ejecutó en Bogotá, Cali y Florencia en donde fueron capturados el Sargento Segundo Eduardo Alexis Duarte Ávila y el soldado profesional Edgar Bañol Varón, uniformados activos del Ejército. También cayeron los militares retirados Jhony Moreno, Andrés Solarte y Diego Salinas.
De igual manera, fueron detenidos los ciudadanos Eduardo Molina Berrio y Eduardo Obando Molina, padre e hijo respectivamente. Todos son investigados por los presuntos delitos de concierto para delinquir y fabricación, tráfico y porte de armas municiones de uso restringido de uso privativo de las Fuerzas Armadas.
Según pudo conocer Caracol Radio, una fuente humana indicó a las autoridades que el armamento salía de diferentes unidades del Ejército Nacional, al parecer, manipulando el Software SAP.
Asimismo, falsificando documentos, los implicados habrían solicitado entrenamientos y reentrenamientos de compañías militares para acceder a material de guerra, principalmente cartuchos y granadas.
Sin embargo, resulta que ese armamento se perdió y habría sido vendido y suministrado a las redes de apoyo de las disidencias FARC, especialmente, en el sur del país, por un valor aproximado de 1.330 millones de pesos.
En ocasiones, el material bélico sería enviado en buses de servicio público y entregados a quienes serían las presuntas conexiones de la red que estarían delinquiendo en Ecuador.
La investigación preliminar que conoció Caracol Radio y que está ahora en manos de la Fiscalía, determinó que estos hechos generaron un detrimento patrimonial para el Ejército Nacional superior a los 466 millones de pesos, por la pérdida de unos 140 mil cartuchos para armas de diferente calibre y 1.300 granadas.
“Estos resultados se obtienen desde las capacidades con las que cuenta el Ejército Nacional, a través de las labores de contrainteligencia institucional que se llevan a cabo de forma permanente, ceñidos a la política de transparencia y cero tolerancia con la corrupción”, indicó la institución en un comunicado.