La reactivación económica, un reto que no para en Colombia

Catorce días después del primer contagio, el 20 de marzo, la alcaldesa Claudia López decreto un simulacro de aislamiento obligatorio en la ciudad, después llegaron las cuarentenas estricticas y posterior a eso las cuarentenas por localidades, estrategias que funcionaban para prevenir contagios del Covid 19 pero que afectaban económicamente a los vendedores informales, emprendedores, empresarios y ciudadanía en general.

Sin embargo, 3 meses después llegó el 19 de junio, una fecha que fue decretada por el presidente Iván Duque como el primer día sin IVA en Colombia una fecha que esperaban los comerciantes.

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Un día antes la Secretaría de Desarrollo Económico hizo un contundente llamado a los bogotanos, para que quienes iban a salir ese día compras, evitaran las aglomeraciones.

“Además de este 19 de junio, el beneficio de exención del IVA, establecido por el Gobierno nacional, aplicará los días 3 y 19 de julio”, recalcó la secretaria de Desarrollo Económico de Bogotá, Carolina Durán, tras señalar que el distanciamiento es la única forma de protegernos y proteger a los demás.

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Con esto, la Administración Distrital hizo un llamado a los comercios para que fortalecerían aún más sus protocolos, a fin de establecer medidas adicionales para controlar que el número de visitantes no superara el 35% de la capacidad de los establecimientos.

Aunque este primer día sin IVA fue todo un caos y 14 días después se incrementaron los casos de Covid 19, la reactivación económica no paraba.

Llegó el 2 de julio del 2020 y la Alcaldía de Bogotá, a través de la Secretaría de Desarrollo Económico, en coordinación con el Instituto Distrital de Turismo, anunciaban la estrategia de piloto de apertura gradual de los restaurantes de la Capital.

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Este proyecto se realizó los días 18, 19 y 20 de julio. “Esta iniciativa busca que el espacio público sea habilitado, temporalmente, para que los restaurantes atiendan a sus comensales con servicio a la mesa y se unan a esta importante tarea de reapertura de la economía de la Bogotá Región” explicó en su momento la secretaria de desarrollo económico Carolina Durán.

Continuaron otras estrategias de reactivación económica, el 30 de julio, arrancó el piloto para abrir restaurantes “a cielo abierto”. Esta propuesta buscaba avanzar en la reactivación económica de algunos sectores económicos, arrancando por lo gastronómico, bajo estrictos requerimientos de bioseguridad, que permitían a la ciudadanía vivir la experiencia urbana de una nueva manera.

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Las zonas que hicieron parte primera fase fue Chapinero, Santa Fe, La Candelaria, Usaquén, Puente Aranda, Tunjuelito, Teusaquillo, Kennedy y Barrios Unidos.

Allí diferentes calles de la ciudad fueren peatonalizadas incluyendo andenes, plazas, cerramientos y parqueaderos, “con esto vamos a lograr además que la gente deje de usar un poco el carro, pues la invitación es que la ciudadanía use otros medios de movilidad y disfrute la ciudad al aire libre, con todas las protecciones necesarias”, dijo la Alcaldesa Claudia López.

Pero los restaurantes no eran los únicos que empezaba a reactivarse también la venta de ropa, el calzado y las mypimes con un nuevo reto para muchos y era llegar a la trasformación digital.