Arranca el Debate General en la ONU
Más de 100 jefes de Estado y de Gobierno asistieron a la Asamblea General de las Naciones Unidas.
El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, dio inicio a la Asamblea General de la organización hablando acerca de los conflictos que hay alrededor del mundo.
Hizo referencia a las crisis de Siria, Yemen, a la migración venezolana, al aumento de las tensiones en el Golfo Pérsico entre la comunidad internacional e Irán y también a hechos en África y en Afganistán.
Le puede interesar: Tribunal Supremo británico considera "ilegal" suspender el Parlamento
Antonio Guterres también habló de la guerra comercial y el enfrentamiento entre China y Estados Unidos, que considera que genera la posibilidad “de una gran fractura”, pues afirma que el mundo se está dividiendo en dos bando.
"Tenemos que hacer todo lo posible para evitar la gran fractura y mantener un sistema universal: una economía universal con respeto universal del derecho internacional, un mundo multilateral con instituciones multilaterales fuertes", declaró en su intervención.
También hizo un llamado a cumplir con la declaración de migrantes de Naciones Unidas, a respetar los derechos humanos en todos los países y a buscar la igualdad y paridad de género en sociedades, empresas y comunidades.
Por otro lado, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, que comenzó con fuertes críticas al socialismo y dijo que en nueve meses de gobierno está rescatando a su país de los efectos de este.
Habló de la crisis en Venezuela y a la interferencia de agentes cubanos en toda América, pero denunció especialmente la presencia de 60 cubanos que “controlan todo en territorio venezolano”.
Lea también: Aprobada la exhumación de Franco por el Tribunal Supremo español
El mandatario centró su discurso, como se esperaba, en los incendios de la Amazonía. Dijo que se trata de algo normal en temporada de sequía y que además se expanden también por prácticas de los indígenas. Aseguró que está comprometido con la protección del medio ambiente y que además “es una falacia decir que la Amazonía es un patrimonio mundial”.
Bolsonaro además denunció que las ONG manipulan a los indígenas para usarlos en sus propios intereses en la selva y en los bosques.