La regla de oro de Katy Perry para enviar mensajes
La cantante confesó que escribe lo que siente, pero muy pocas veces lo envía. Esto como ejercicio de catarsis.
A base de malas experiencias, Katy Perry ha aprendido que las únicas palabras de las que nunca se arrepentirá son aquellas que no haya llegado a pronunciar en voz alta. Por otra parte, en la nueva era de la información y la tecnología, cualquier mensaje de texto, tuit o whatsapp que envíe, tras una mala noche de fiesta o en un momento de enfado puede acabar persiguiéndola durante toda su vida, razón por la cual se ha impuesto, como norma, no enviar ningún mensaje de manera impulsiva. Es decir, sin reflexionar al respecto, al menos una noche entera.
"A veces no deberías pulsar en botón de enviar. Es una especie de lección en autocontrol. Me gusta hacer un borrador y pensarlo durante la noche porque, en mi caso, mis emociones están a flor de piel, a última hora del día, y cuando me despierto por las mañanas, a menudo, acabó pensando: 'Me alegro tanto de no haber enviado tal o cual cosa. Puedo pasar sin meterme en una situación como esta'", ha explicado la cantante de 'Chained To The Rhythm' en una conversación con el podcast 'Conversations With Delilah'.
Esta técnica de Katy también le ha valido para ahorrarle muchos disgustos en el terreno sentimental, aunque, en ese caso, también cree firmemente que poner por escrito sus sentimientos puede ayudarle a conseguir algo de perspectiva en situaciones confusas.
"Me he visto en ese ciclo antes en una relación, y en ocasiones ha servido para reavivar la relación, pero hay solo un límite de veces en que puedes reavivar la llama o en las que quieras, así que a veces lo único que deberías hacer es escribir lo que sientes pero no enviárselo. Es una especie de ejercicio de catarsis", ha asegurado.