¿A quién le conviene dilatar la votación de las objeciones?

Debate de Hora 20 sobre lo que pasó en la plenaria del Senado que fue convocada para estudiar las objeciones a la ley estatutaria de la Jurisdicción Especial de Paz.

La votación, como estaba previsto, se dilató. Primero, con el estudio de los impedimentos de los senadores que tienen conflictos con el tema y luego con el empleo de estrategias para impedir el debate y la votación.

Una de esas jugadas fue la del presidente del Senado, Ernesto Macías, de recusar a su colega opositor Iván Cepeda porque su esposa trabaja en la JEP. El senador Roy Barreras corrió la misma suerte por haber sido negociador de los acuerdos de paz, según la tesis de senadores del uribismo. Pero Barreras usó la misma estrategia y recusó a los senadores Macías y Álvaro Uribe.

La figura de la recusación haría que el asunto pase a la comisión de ética que deberá pronunciarse este martes.

En otras decisiones polémicas, fueron habilitados para seguir en el debate senadores como María del Rosario Guerra y Paola Holguín a quienes en principios de les habían aprobado los impedimentos.

Además ha habido una asistencia por debajo de lo esperado y con unas votaciones de senadores de la U que habrían sido convencidos por el gobierno para estar de su lado.

La dilación

Catalina Botero, decana de derecho de la Universidad de los Andes, insiste en que la JEP necesita reglas para poder operar y para eso se necesita la ley estatutaria cuyas objeciones quedaron empantanadas.

“Es una estrategia de los distintos partidos, pero no me parece leal”, dijo al comentar lo que pasó en el Senado.

Pero para Francisco Bernate, profesor y abogado penalista, es mejor que en la plenaria se saquen todo lo que se tengan que sacar de una vez en materia de impedimentos para tramitar el proyecto de ley.

Dice que lo que se dio en la plenaria reviste de toda legitimidad al proceso del trámite de las objeciones a la ley de la JEP.

Según Andrés Forero, concejal de Bogotá por el Centro Democrático, es válido que se recuse, en el caso del estudio de las objeciones a un senador cuya esposa trabaja en la JEP.