Radiografía de la violencia y el narcotráfico que acecha a Santa Marta
Defensores de derechos humanos del Magdalena hacen su análisis sobre las políticas de seguridad implementadas por las autoridades.
Foto de referencia. / Colprensa
Las irrupciones de violencia han trastocado la tranquilidad en Santa Marta. De acuerdo con las cifras que manejan los defensores de derechos humanos de esta zona del país y también catedráticos sobre los asesinatos - en lo corrido del 2021 - son abrumadoras y demandan de una solución expedita.
Lerber Dimas, antropólogo y experto en temas de seguridad, cuestiona en sus redes sociales el accionar poco efectivo de las autoridades locales frente a los índices de violencia en esta región y hace un análisis de cómo actúa la violencia en este territorio.
Dimas refiere que en este mes de junio de 2021 "se cumplen dos años de la muerte de alias Chucho Pachencas y uno de la muerte de alias 80. Dos criminales importantes. Uno, jefe de los Pachencas y el otro, -ACSN-. Paradójica o convenientemente, las autoridades siguen haciendo una lectura errada de territorio".
"A Pachenca lo dio de baja la fuerza pública el 17 de junio de 2019. A la fecha de su muerte, Santa Marta sumaba 57 homicidios. Se había ampliado el rango extorsivo y por su puesto: la expansión hacia Ciénaga, Zona Bananera y Fundación. Era innegable su vínculo con el narcotráfico", trina el defensor de derechos humanos Lerber Dimas.
Detalla que, "un año después, dan de baja a alias 80 -16 de junio-. A esa fecha, Santa Marta sumaba 55 homicidios. No había una reducción importante. Sin embargo, este grupo, las ACSN., avanzaron hacia Fundación y el Copey: aprovecharon la pandemia".
"SANTA MARTA Y CIÉNAGA, DOMINADAS POR LAS ACSN"
El antropólogo sostiene que Santa Marta y Ciénaga, están bajo el control y el dominio de las ACSN.: Santa Marta, suma 67 homicidios y Ciénaga 34.
"Las dos tiene una política de seguridad pésima, basada incluso en el desconocimiento de las dinámicas del territorio. Siguen llamando Pachencas a algo que desapareció hace dos años y le siguen atribuyendo todas las incautaciones de droga. Los dueños reales de esa cocaína, felices. Asimismo, los homicidios y la extorsión. Realmente esto es insostenible", asegura a través de cuenta de Twitter.
Finaliza diciendo que, "el balance, luego de la muerte de estas personas es perverso. Seguimos metidos en un hueco de inseguridad generalizada. Tenemos unas ACSN., que controlan gran parte del territorio. Incluso que se atreven a robarle fusiles a la policía ¿o, ya aparecieron?".
Lo cierto es que el hartazgo violento en la capital del Magdalena preocupa no solo a los defensores de derechos humanos, sino también a la misma ciudadanía que le hace un llamado a las autoridades para que se apersonen del tema y replanteen las políticas de seguridad y ataquen con contundencia a los actores ilegales que están generando esa percepción de inseguridad en esta zona del país.
