Campesinos de Boyacá desesperados con la fruta represada por la pandemia
Aseguran que tendrán que botar a la basura el alimento porque no hay quien les ayude a transportarlo para venderlos.
Tunja (Colombia)
La situación es dramática, pues los campesinos dependen de esa comercialización para sobrevivir.
Según los cultivadores de fruta, el panorama es triste y gris para ellos en medio de la crisis generada por el Covid-19. Al parecer la demanda de frutas ha caído por la pandemia, pero tampoco se promueve la manera de transportar la fruta de los pequeños productores.
Este es el drama, por ejemplo, de los campesinos que cultivan peras en Nuevo Colón (Boyacá).
“Tengo cientos de canastas de pera que ya no tengo ni a quién regalárselas, y esto tendrá que botarse a la basura, desperdiciándose. Yo enviaba a Bogotá y a Bucaramanga mi fruta, pero, ya no tengo quién me ayude a llevarla porque no los están dejando pasar, y nosotros ya no sabemos qué hacer. Hemos regalado lo que más podemos, hemos alimentado el ganado con peras, pero tampoco los podemos saturar con ellas porque se nos enferman”, explicó uno de los productores de pera del municipio, que además, es adulto mayor, y que con su cosecha, sostiene a su familia.
Agregó el campesino que “sin poder vender nuestra cosecha, no sabemos cómo cumplir con nuestras deudas con el Banco Agrario, que sigue manteniendo la obligación. Entonces, le queremos pedir encarecidamente al gobierno que por favor nos apoye, que no nos deje solos, que nos deje vender la fruta, porque si no, tendremos conflictos muy graves para los que alimentamos a este país”.
En el congreso, le piden al gobierno nacional poner los ojos urgentemente en estos casos. El representante a la Cámara por Boyacá Cesar Pachón, explicó que “este martes cite a un debate de control político al Ministro de Comercio Exterior y al Ministro de Agricultura, para poner en cintura al gobierno nacional para que nos expliquen las decisiones que han tomado para el campo, las cuales no han surtido efecto, la crisis se acrecienta tenemos campesinos muy afectados y más que todo los productores de la fruta porque este alimento, el gobierno nacional no lo ve como un alimento de primera necesidad y no se preocupan por ayudar en un proceso de comercialización”.
Pachón agregó que “la gente sigue debiéndole al banco y lo triste es que tienen el riesgo de terminar rematando su patrimonio, entonces necesitamos que el gobierno no haga caso omiso a nuestros productores de fruta, que no sigamos improvisando con estos campesinos. Los ministros no asistieron a este debate de control político, mientras que la situación sigue siendo critica”.
Mientras tanto los campesinos siguen esperando un salvavidas en medio de la pandemia, ya que no solamente advierten la quiebra, sino que las deudas crecen, y en desperdicio de alimentos, se eleva exponencialmente.