En armonía con el medio ambiente: así es el compromiso de Cerro Matoso

Cerro Matoso trabaja en conjunto con las comunidades vecinas a su operación para el cuidado de los ecosistemas que lo rodean. Fruto de esto, su proceso minero – industrial convive en armonía con el ambiente.

Las mil hectáreas de bosques conservados que rodean la operación de Cerro Matoso albergan diversas especies de fauna, que contribuyen de manera natural a la generación de nuevos bosques y de árboles nativos.

A continuación, mencionamos algunas especies de animales y plantas, resultado de la conservación de este hábitat que rodea a Cerro Matoso:

El tití cabeciblanco (Saguinus oedipus), una especie endémica de Colombia declarada en peligro, la nutria, el tigrillo, la pigua y la guacharaca son algunas de las especies que conforman la biodiversidad en el paisaje que rodea a Cerro Matoso.

En cuanto a la flora, Cerro Matoso sembró en el 2019, por compensación ambiental, 47.241 árboles en 96.01 hectáreas. Las viveristas comunitarias vecinas a Cerro Matoso son las protagonistas en las siembras, ya que ellas son las responsables de plantar las semillas y verlas crecer hasta que se convierten en pequeños árboles. La empresa, en forma de respaldo a la economía familiar de estas mujeres, les compra estas plántulas, destinadas a las siembras.

Son muchos los árboles que se pueden encontrar en los alrededores de Cerro Matoso. Se destacan cinco especies: el caracolí, ébano –clave en la recuperación de suelos, medicinal y maderable-, algarrobo –produce un fruto comestible con varios usos-, el guarumo y el tambolero.

Cerro Matoso, comprometida con la biodiversidad de Córdoba.