Las demoras en el Palonegro de Bucaramanga se originan en otras terminales aéreas
Es frecuente que los pasajeros se quejen porque las aeronaves no llegan a tiempo desde otras zonas.

Las demoras en el Palonegro de Bucaramanga se originan en otras terminales aéreas / Caracol Radio
El aeropuerto Palonegro que sirve a Bucaramanga es uno de los 6 terminales del norte y el oriente del país que se encuentra concesionado desde hace 5 años a una firma colombo-coreana, Aeropuertos del Oriente SAS, que ha mejorado sus instalaciones pero de forma paralela, el número de pasajeros movilizados cayó durante los primeros 7 meses de 2016.
La terminal de Bucaramanga muestra un descenso en el número de personas movilizadas calculado en un 6.34%, entre enero y agosto pasado con relación al mismo periodo de 2015 según el reporte de la Aeronáutica Civil.
Así las cosas, durante los primeros 7 meses del año se movilizaron por Palonegro 1 millón 143 mil 344 pasajeros lo que significa un promedio diario de 5 mil 400 personas.
Sin embargo, quienes usan sus servicios aseguran que el mayor problema radica en el incumplimiento de las horas de salida de los vuelos nacionales.
En ese sentido Mariana Bermeo, una de las viajeras de este aeropuerto explicó que usualmente los vuelos se retrasan por mal tiempo: “en un caso específico venía de Medellín y el mal tiempo hizo que mi viaje tardara 3 horas más de lo estipulado por la aerolínea”.
Humberto Rodríguez, también viajero, señaló que regularmente “la empresa Viva Colombia, cancela los vuelos sin justificaciones claras, no les avisa a los pasajeros y ellos se ven molestos y forman los alborotos acá en el aeropuerto porque es algo muy incómodo. Y no solo para ellos sino para los pasajeros de las demás aerolíneas que trabajan en este aeropuerto”.
Por su parte, Andi Ríos, habitante de la zona donde está ubicado este terminal se quejó de la contaminación que presentan los alrededores debido a que impide que haya un buen aspecto y de paso impide la sana convivencia para las personas que tienen terrenos en este sector.
Tatiana Blanco, de la Administración Aerocivil, Aeropuerto Internacional Palonegro informó que desde allí operan 6 aerolíneas que ofrecen vuelos directos a la mayoría de las ciudades colombianas, pero en un 50% hacia la capital de la república hacia donde hay trayectos cada hora.
Aunque tiene el rótulo de internacional desde Palonegro solo sale un vuelo semanal hacia un destino de otro país: Panamá que presta la aerolínea Copa.
Los gremios económicos de Bucaramanga han hecho gestiones para que cuando Palonegro logre la certificación internacional haya un vuelo directo que conecte a la ciudad con el sur de la Florida, Estados Unidos.
De acuerdo a Juan Camilo Beltrán Domínguez, presidente de la Cámara de Comercio de Bucaramanga esa posibilidad se concretaría en el segundo semestre del próximo año.
Con el propósito de acceder a este tipo de vuelos, Aerocivil contrató obras por $60 mil millones para mejorar las condiciones de navegación y en esa tarea se trabaja en la construcción de una nueva torre de control.
De hecho, esas actividades corresponden a la tercera fase de modernización del aeropuerto bumangués lo cual implica además labores de adecuación de la cabecera de la pista central y del área de oficinas.
Mientras se efectúan los trabajos, Palonegro opera con una torre móvil que estará en funcionamiento durante los siguientes 7 meses.
En ese lugar trabajan a diario unos 24 controladores distribuidos en tres turnos.
En septiembre de 2015 la entonces ministra de Transportes de Colombia, Natalia Abello había advertido en la Asamblea General de la Organización Mundial de Turismo, efectuada en Medellín que 3 aeropuertos del país, entre ellos Palonegro, iban a recibir la certificación internacional sugerida por la Organización de Aviación Civil Internacional, OACI, para homologarse en seguridad operacional aeroportuaria.
Sin embargo, más de un año después de ese anuncio no se cumplió esa meta.
Un factor de tipo ambiental siempre ha sido un motivo de preocupación para las autoridades aeronáuticas: el hecho de que el relleno sanitario de Bucaramanga, El Carrasco esté en el cono de aproximación de la terminal aérea.
Ha sido frecuente en los últimos años que se reporten incidentes por el choque de gallinazos contra los aviones que arriban o despegan sin que ninguno de estos casos haya pasado a mayores.
De igual forma la cercanía a varios galpones de pollos ha generado que alrededor de la terminal aérea se presenten problemas por las moscas abundantes en la recepción de este aeropuerto, algo que el concesionario ha intentado controlar colocando plantas que desplazan a estos insectos con sus aromas, aunque no lo han conseguido en un 100% explicaron trabajadores de este terminal que sufren esta contaminación diariamente.
La infraestructura que se encuentra en proceso de ampliación también está generando complicaciones debido a que la entrada del aeropuerto no cuenta con aire acondicionado y el calor resulta inmanejable para los trabajadores de las aerolíneas y por supuesto, para los viajeros.
De igual manera, quienes usualmente viajan demandan una reforma al área de parqueaderos porque siempre es insuficiente el número de cupos para estacionar los carros particulares.



