¿Por qué da hipo y qué precauciones debe tener cuando le dé? Razones, peligros y formas de quitarlo
Este reflejo involuntario activa un circuito nervioso en el que participan el nervio frénico, el nervio vago y algunas fibras del sistema nervioso simpático.

Hipo, imagen de referencia (Getty Images). / nicoletaionescu
El hipo, conocido en medicina como ‘singultus’, es un fenómeno que se produce cuando el diafragma se contrae de manera súbita y la glotis se cierra de forma inesperada, generando ese característico sonido.
De acuerdo con la ‘Mayo Clinic’, este reflejo involuntario activa un circuito nervioso en el que participan el nervio frénico, el nervio vago y algunas fibras del sistema nervioso simpático.
Este arco reflejo se desencadena con estímulos tan comunes como comer demasiado rápido, beber líquidos con gas o experimentar cambios bruscos de temperatura.
Aunque la ciencia aún no ha determinado con certeza cuál es la función del hipo, los especialistas en fisiología y neurología coinciden en que, en la mayoría de los casos, no representa un riesgo para la salud.
De esta manera, desaparece de manera espontánea tras unos minutos. No obstante, cuando persiste durante días, puede ser señal de un problema subyacente y se recomienda recurrir a una evaluación clínica.
¿Cuáles son las principales causas y riesgos del hipo?
El hipo puede tener diversas causas y su origen suele variar según la especialidad médica que lo analice. También se asocia con la distensión abdominal después de comer, el consumo de bebidas gaseosas o la presencia de reflujo gastroesofágico, de acuerdo con la ‘Cleveland Clinic’.
Desde otra perspectiva, el problema puede surgir por la irritación del nervio vago, ya sea a causa de procesos inflamatorios como la laringitis o incluso por cuerpos extraños alojados en el oído.
La neurología, por su parte, lo vincula con alteraciones del sistema nervioso central, entre ellas accidentes cerebrovasculares, tumores cerebrales o infecciones como la meningitis, según el ‘Journal of Neurogastroenterology and Motility’.
La medicina interna también ha descrito causas metabólicas, como insuficiencia renal, diabetes o desequilibrios electrolíticos, reportados por la ‘National Library of Medicine’. Aunque en la mayoría de los casos el hipo es pasajero, se advierte que el hipo persistente puede generar complicaciones importantes y alertar sobre enfermedades graves.
¿Cuáles son las mejores estrategias para detener el hipo?
El tratamiento del hipo se centra en interrumpir el reflejo responsable o disminuir la actividad excesiva del diafragma.
Entre los remedios caseros más utilizados están contener la respiración, inhalar y exhalar dentro de una bolsa de papel, beber agua fría o realizar la maniobra de Valsalva, que consiste en intentar exhalar con fuerza con la nariz y la boca cerradas. De esta forma, se simula un esfuerzo similar a estar pujando
Todas estas técnicas buscan elevar los niveles de dióxido de carbono en la sangre o estimular el nervio vago, lo que ayuda a calmar el espasmo diafragmático.
Otros métodos, como tragar una cucharada de azúcar o chupar un limón, descritos por la ‘Cleveland Clinic’, actúan como estímulos mecánicos que también logran interrumpir el ciclo del hipo.
Finalmente, en situaciones en las que el problema se prolonga, la National Library of Medicine (PMC) documenta el uso de fármacos como clorpromazina, baclofeno o gabapentina. En los casos más graves y resistentes, se han reportado alternativas como la estimulación del nervio vago, bloqueos del nervio frénico o incluso procedimientos quirúrgicos.



