La ‘ansiedad por el lunes’ podría traer efectos negativos para el cuerpo, según estudio

¿Alguna vez se ha sentido que los lunes son más estresantes que el resto de los días? No es solo una percepción: la ciencia lo confirma. Un reciente estudio publicado en el Journal of Affective Disorders descubrió que las personas que reportan ansiedad los lunes tienen niveles más altos de cortisol (la hormona del estrés) semanas después, en comparación con quienes se sienten ansiosos otros días.

Lo más sorprendente es que este efecto no solo aplica para quienes trabajan, sino también para jubilados y personas que ya no están activas laboralmente.

La investigación, realizada por la Universidad de Hong Kong con datos de más de 3.500 adultos mayores en Inglaterra, analizó la relación entre el estrés al inicio de la semana y los niveles de cortisol en el cabello, un marcador que refleja la actividad del estrés en el cuerpo durante los últimos meses. Los resultados fueron claros:

• Los “lunes ansiosos” están ligados a un 23% más de cortisol en comparación con otros días.
• Este efecto se mantuvo incluso en personas que ya no trabajan, lo que sugiere que el impacto del lunes va más allá del trabajo.
• No se encontraron diferencias significativas en los niveles de estrés los demás días de la semana.

“El lunes parece ser un día especialmente desencadenante de estrés crónico, y eso tiene consecuencias a largo plazo en la salud”, explicó el doctor Tarani Chandola, uno de los autores del estudio.

¿Por qué los lunes afectan tanto?

Aunque tradicionalmente se ha asociado el estrés del lunes con el regreso al trabajo, este estudio revela que hay algo más profundo. Algunas teorías sugieren que:

1. El cambio de ritmo: Pasar del descanso del fin de semana a la actividad repentina del lunes puede ser un choque para el organismo.
2. La carga mental: Muchas personas asocian el lunes con obligaciones acumuladas, lo que genera ansiedad anticipada.
3. Un patrón cultural: Socialmente, el lunes se ha convertido en un símbolo de presión, lo que refuerza la sensación de estrés.

“Lo preocupante es que, aunque la persona deje de trabajar, ese patrón de ansiedad los lunes puede persistir, afectando su salud cardiovascular a largo plazo”, advirtió Chandola.

¿Qué se puede hacer para reducir el impacto del “lunes ansioso”?

Aunque no se puede eliminar por completo el estrés de los lunes, los expertos recomiendan:

• Prepararse el domingo: Organizar tareas pendientes y planear el lunes con anticipación puede reducir la ansiedad.Dormir bien: Un descanso adecuado ayuda a regular el cortisol.Hacer ejercicio: La actividad física libera endorfinas, que contrarrestan el estrés.Practicar mindfulness o respiración: Técnicas de relajación pueden ayudar a manejar la ansiedad.

Este hallazgo refuerza la idea de que el estrés no es solo un problema emocional, sino que tiene efectos físicos reales. El cortisol elevado por largos períodos se ha relacionado con, mayor riesgo de enfermedades cardíacas, problemas de sueño y debilitamiento del sistema inmunológico. “Es crucial que las personas presten atención a cómo manejan el estrés los lunes, porque ese día podría estar influyendo en su salud más de lo que imaginan”, concluyó Chandola.