Así es como Colombia está actualizando sus compromisos climáticos
Adaptación al cambio climático, restauración de ecosistemas, seguridad hídrica y Soluciones basadas en la Naturaleza

Imagen de referencia de medio ambiente. / Yagi Studio
Colombia está en proceso de actualización de su Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC, por sus siglas en inglés), es decir, los compromisos climáticos que el país presentará a finales de este año ante la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), durante la COP30 en Brasil. En esta nueva versión, el país incorporará de manera inédita las voces de los gobiernos subnacionales, comunidades y actores locales, marcando un giro hacia una acción climática más participativa, territorial e inclusiva.
Las prioridades emergentes de este proceso, liderado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y WRI Colombia, reflejan las necesidades más urgentes de los territorios: adaptación al cambio climático, restauración de ecosistemas, seguridad hídrica y Soluciones basadas en la Naturaleza. Esta orientación responde directamente a los impactos crecientes que enfrentan ciudades y regiones ante fenómenos como inundaciones, deslizamientos de tierra y olas de calor extremo.
La directora del programa de Clima, Economía y Finanzas de WRI Colombia, Carolina Useche, manifestó en diálogo con Planeta Caracol que “las soluciones locales son indispensables para alcanzar los objetivos climáticos nacionales. Escuchar y priorizar lo que proponen las regiones y ciudades es fundamental para construir una NDC 3.0 ambiciosa, justa y viable. Desde WRI Colombia seguiremos apoyando una gobernanza climática que ponga a los territorios en el centro de la acción”.
Durante la segunda mitad de 2024, WRI Colombia y el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible implementaron una estrategia para involucrar a los gobiernos locales en el proceso de actualización de la NDC, un esfuerzo alineado con el compromiso que el país asumió al unirse a la Coalición para Alianzas Multinivel de Alta Ambición (CHAMP) durante la COP28 en Dubái, que promueve una colaboración más estrecha entre gobiernos nacionales y subnacionales en la planificación e implementación de políticas climáticas.
WRI Colombia apoya el cumplimiento de estas metas por medio de esta iniciativa, que contó con el apoyo de Bloomberg Philanthropies y la Cooperación Alemana para el Desarrollo (GIZ), por encargo del Ministerio Federal de Economía y Protección del Clima (BMWK), en el marco de la Iniciativa Internacional del Clima (IKI), e incluyó cinco talleres regionales con un enfoque participativo e inclusivo. Se sumaron representantes de más de 35 ciudades y departamentos, además de jóvenes, mujeres, comunidades afrocolombianas, secretarías de gobierno y empresas privadas.
En el ámbito urbano, las ciudades pusieron el foco en medidas de adaptación orientadas a fortalecer la resiliencia climática: restauración de riberas, conservación de humedales y ampliación de zonas verdes fueron algunas de las propuestas más destacadas. Aunque también se formularon acciones de mitigación, estas fueron menos frecuentes y se concentraron especialmente en la gestión de residuos.
Por su parte, los departamentos priorizaron la protección de fuentes hídricas, el impulso de la agroforestería comunitaria. También subrayaron la urgencia de contar con mecanismos claros de financiamiento climático, fortalecer la planificación territorial y acceder a capacidades técnicas que les permitan implementar las medidas propuestas de manera efectiva.
Al mismo tiempo, tanto ciudades como regiones hicieron un llamado a incorporar principios de transiciones justas y justicia climática en la nueva NDC. Esto incluye garantizar la equidad de género, los derechos humanos, la inclusión étnica y la construcción de paz. Además, señalaron beneficios complementarios de la acción climática como la generación de empleo, la conservación de la biodiversidad y el fortalecimiento de economías locales.
Una de las conclusiones más relevantes del proceso fue la necesidad de mejorar la articulación entre el nivel nacional y los gobiernos subnacionales. Según Carolina Useche, “como aspecto a mejorar encontramos que se requieren incentivos por parte del gobierno nacional, tanto fiscales como financieros, y apoyo político, para que los gobiernos locales puedan implementar las medidas propuestas”.