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¿El pollo es cancerígeno? Un estudio advierte sobre posibles riesgos en su consumo

El consumir pollo más de un determinado número de veces a la semana estaría relacionado con síntomas de tipos de cáncer digestivos, según estudio.

Consumo de Pollo podría traer cáncer estomacal

Consumo de Pollo podría traer cáncer estomacal

Según datos oficiales de Fenavi, los colombianos consumen en promedio 36,7 kilos de pollo por habitante al año. Esto significa que aproximadamente la población total de Colombia consume alrededor de 2,9 millones de toneladas de pollo todos los años.

Un estudio reciente del Instituto Nacional de Gastroenterología de Italia, publicado en la revista científica Nutrients, (que usted puede consultar a través de ESTE ENLACE) encontró que comer pollo con regularidad podría duplicar el riesgo de morir por 11 tipos de cáncer digestivo, lo cual contradice la creencia común de que el pollo es una alternativa más saludable frente a la carne roja o procesada.

Se analizaron datos de salud y alimentación de casi 5000 personas, en su mayoría personas mayores de 50 años durante 20 años, y se encontró que consumir más de 300g de pollo por semana (es decir 4 porciones o más) duplica el riesgo de morir por cáncer digestivo frente a quienes comen menos de una porción semanal.

También se asoció con un 275% más de riesgo de muerte por cualquier otro tipo de causa. Por otro lado, se descubrió que este efecto es más pronunciado en los hombres que en la población femenina.

Factores de riesgo y recomendaciones

La posible explicación que dan los científicos es que esto se deba a diferentes factores que pueden inducir a los efectos adversos:

  • La forma de cocinar el pollo (altas temperaturas) puede generar compuestos químicos dañinos.
  • Alimentación, hormonas o medicamentos usados en la crianza del pollo podrían influir.
  • Diferencias hormonales entre hombres y mujeres o el tamaño de las porciones (los hombres tienden a comer más) podrían explicar la diferencia de riesgo.

Si bien el estudio es una forma de guiarse para decidir qué tipo de carnes consumir, es necesario entender que hay algunas limitaciones de la investigación. Por ejemplo, no se registró cómo se cocinaba o se consumía el pollo, si se trataba de una comida rápida o cocinada en casa.

Tampoco se incluyeron datos sobre actividad física de los participantes y, aunque se ajustaron algunos factores (como el tabaquismo y el peso), estas omisiones podrían afectar la precisión de los resultados.

Opinión de Fenavi sobre el estudio publicado en Nutrients

La Federación Nacional de Avicultores de Colombia (Fenavi) manifestó a Caracol Radio su posición frente a al estudio. Según la federación, las conclusiones del estudio deben analizarse con precaución, especialmente por las limitaciones metodológicas señaladas por expertos en nutrición.

La nutricionista clínica Claudia Angarita Gómez, directora del Centro Colombiano de Nutrición Integral, ha destacado que el estudio incluye diversas especies de “aves del corral” –como pato, pavo, ganso, conejo y paloma–, lo cual impide atribuir sus conclusiones exclusivamente al pollo. Este matiz es especialmente importante en un contexto como el colombiano, donde el pollo es una de las principales fuentes de proteína animal y su producción cumple con estrictas normas sanitarias, incluyendo la prohibición del uso de hormonas.

Fenavi también ha subrayado que el estudio en cuestión se basa en una muestra localizada en regiones específicas del sur de Italia, lo cual limita su aplicabilidad a otras poblaciones. Además, se han señalado posibles sesgos de selección y de confusión que podrían afectar la validez de los resultados.

La federación insiste en que el pollo es una carne magra, rica en proteínas de alto valor biológico, vitaminas del complejo aB y minerales esenciales, y que su consumo moderado forma parte de una dieta saludable. Diversas investigaciones respaldan esta afirmación, especialmente cuando se compara el pollo con otras carnes procesadas o rojas en términos de riesgo para la salud.

En conclusión, Fenavi considera que el estudio no proporciona evidencia concluyente sobre una relación directa entre el consumo de pollo y enfermedades como el cáncer gastrointestinal. En cambio, enfatiza la importancia de promover una dieta equilibrada, variada y basada en hábitos saludables, en la que el pollo continúa siendo una opción nutritiva y segura para los colombianos.

Recomendaciones para el consumo de pollo

Si se hace una comparación con el consumo de carne roja, comer más de 350g de carne roja por semana también está relacionado al mismo riesgo de presentar cáncer en general. Según Cancer Research UK, el 21% de los casos de cáncer de colon y el 3% de los cánceres en general de Reino Unido, tienen que ver con el consumo de carne roja o procesada.

Por esta razón, los investigadores advierten que un consumo excesivo de pollo puede ser perjudicial, y recomiendan limitar el consumo de este tipo de carne a por lo menos 90g por día.

Así mismo se recomienda evitar cocciones a altas temperaturas, para utilizar otros métodos más saludables de preparación, como por ejemplo hervir el pollo o cocinarlo al vapor. El horno también es una buena opción para hacer este tipo de preparaciones, siempre y cuando se haga a baja o media temperatura. Saltearlo a fuego medio con una cocción lenta a la plancha sin que se queme puede ser una buena alternativa de igual forma.

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