Salud y bienestar

Decir “no” sin culpa: la clave para una vida más equilibrada según expertos y psicólogos

Comunicarse asertivamente le trae grandes beneficios a su vida. Le contamos porque cuesta decir que no y qué hacer ante este panorama.

Decir “no” sin culpa. Foto tomada de Canva

Decir “no” sin culpa. Foto tomada de Canva

El saber decir “no” es una cuestión que se estudia desde la psicología en personalidad y el carácter. Trata de comunicarse de manera asertiva y óptima con los demás, ya que no solamente es expresarlo, es saber cómo decirlo y el momento para hacerlo.

En muchas ocasiones hay situaciones incómodas o se quiere expresar que no se está de acuerdo con algo, pero para muchas personas resulta complicado. Para la psicóloga Natalia Franco, aunque parece a simple vista que es una palabra sencilla, corta y que se utiliza con frecuencia, es una de las dificultades por las que las un gran número de personas asisten a consultas.

El no decir que no cuando realmente se desea, lleva a sentimientos como la frustración por complacer a los demás, pero sobrepasar su placer. Por otro lado, si se dice y lleva a la culpa, también es un escenario que hay que revisar. Recuerde que comunicarlo de la mejor manera brinda tranquilidad, estabilidad en sus emociones y mejora las relaciones personales.

¿Porqué cuesta tanto decir no?

La experta Franco en uno de sus podcast de Área Humana Psicología y el Instituto Terapéutico de Análisis de Conducta (ÍTACO), expresan que esto se debe específicamente a cinco factores clave:

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  1. Miedo al rechazo: se teme a la reacción de los demás, o a que piensen que algo malo de la persona.
  2. Conducta aprendida: creer que esta palabra puede herir, ser mala educación o cruel. Rechazar peticiones se convierte en un sentimiento de culpa.
  3. No saber cómo expresarlo: cuando se han tenido antecedentes de enfrentamiento o agresividad, ocasiona que las personas siempre que digan esta palabra se encuentren ante entornos de conflicto y prefieran no usarla para evitarlos.
  4. Hábito de respuesta evitativo: se han tenido experiencias negativas que recuerdan que usar esta palabra, podría solo atraer problemas.
  5. Emociones displacenteras: suelen aparecer cuando ya se esta haciendo uso de la palabra o se está poniendo un límite, pero en medio de la situación surgen nervios, angustia o sensación de escapar.

Estrategias para aprender a decir no

Para comenzar a mejorar esta habilidad es importante tener en cuenta que es algo que se puede aprender y se entrena dependiendo los acontecimientos. Para Franco, no es algo con lo que se nace conscientemente, pero si se va poniendo en práctica a lo largo de la vida.

La técnica del Sandwich es un buen comienzo para las personas que quieren ser más asertivas al comunicar una respuesta negativa. Lo que sugiere esta estrategia es crear un ambiente relajado y cómodo, expresar la crítica o petición de cambio y volver al entorno positivo en el que se empatiza y se agradece por la escucha.

Como consejo adicional, ÍTACO propone en su página web, aprender a conocerse a sí mismo y comprende cuales son sus límites y bajo qué circunstancias se siente mejor expresandolos. Reflexione sobre sus propias necesidades para comunicarlas claro, directo y sin ser grosero.

Cabe destacar que no siempre se puede decir no bajo estas circunstancias, pero si es algo que cuesta demasiado, vale la pena buscar escenarios en los que se sienta más capaz de afrontar este miedo y no hacerlo de manera impulsiva.

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