Iniciaron las Escuelas de Campo para impulsar la agricultura sostenible y asociatividad en Bolívar
Se están implementando en 31 municipios del departamento

Cortesía
Cartagena
Con el fin de mejorar la productividad, fomentar la participación ciudadana y fortalecer las capacidades organizativas de las comunidades bolivarenses, el proyecto “Servicio Público de Extensión Agropecuaria”, liderado por la Universidad de Cartagena como Entidad Prestadora del Servicio de Extensión Agropecuaria (EPSEA), en alianza con la Agencia de Desarrollo Rural (ADR), comenzó las Escuelas de Campo (ECAs), a través de visitas a los predios y fincas de los 5.538 usuarios campesinos.
Las ECAs, que se están implementando en 31 municipios del departamento de Bolívar, en las siete Zonas de Desarrollo Económico y Social (ZODES)—Norte, Dique, Montes de María, Mojana, Isla Mompox, Loba y Magdalena Medio—; están orientadas a resolver las necesidades identificadas en jornadas de Caracterización Territorial Participativa (CTP).
Entre los temas clave abordados se encuentran el uso de Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), Pecuarias y/o Pesqueras (BPP), la conservación de suelos, la aplicación de bioinsumos y biopreparados, además de estrategias para la mitigación y adaptación al cambio climático.
Ingresa al grupo de alertas de Caracol Radio Cartagena
Experiencias destacadas de las Escuelas de Campo
Una de las ECAs más destacadas fue la realizada en la vereda Patio Grande, en el municipio de San Jacinto, donde los productores de esta vereda, así como de Altamira, La Puente y Bajo de Osos, aprendieron sobre sanidad del suelo, abono orgánico y cómo mejorar la producción agrícola mediante prácticas saludables y limpias. Además, se destacó la importancia de la asociatividad para fortalecer los procesos organizativos, comerciales y empresariales de las comunidades.
“Con estas escuelas buscamos concientizar a los agricultores sobre los beneficios de asociarse, trabajar en equipo y aprovechar las ventajas que esto trae, ya que les permitirá resolver problemas comunes a nivel familiar y comunitario”, comentó el extensionista Marcelo Patrón.
En el municipio del Carmen de Bolívar, en la vereda Mala Noche, los usuarios también adquirieron conocimientos sobre cómo elaborar bioinsumos y extractos vegetales para el control de plagas y enfermedades. Así lo resaltó Enerlis Agámez, campesina de la vereda Ojo de Agua: “Las charlas fueron muy importantes porque nos enseñaron a aprovechar mejor el suelo. Todo me pareció excelente, especialmente la información sobre los microorganismos y el reciclaje, que también podemos aplicar en nuestros hogares para cuidar el medio ambiente.”
Igualmente, la experiencia fue positiva para Ubaldo Quintana, campesino de Turbana, quien participó en la ECA sobre residuos aprovechables, biofertilizantes y agroecología. “Nunca estudié, pero me gusta venir a estos talleres para aprender y luego compartir lo aprendido con los demás, hacer lo correcto y no dañar nuestros cultivos ni la naturaleza”, expresó.
Así, el proyecto continúa avanzando en su misión no solo de contribuir al progreso del sector agropecuario y de resolver problemas reales mediante la aplicación del conocimiento académico, sino también de promover el crecimiento económico en las comunidades rurales bolivarenses.