‘Nos desplazamos porque el Clan del Golfo nos mandó a decir que trabajáramos con ellos’
Caracol Radio conversó con una líder social de Anorí que le tocó desplazarse y que hoy está muy preocupada por los animalitos que dejó a la intemperie en su finca.
Anorí, Antioquia
Mientras que las autoridades tratan de retomar el control de la zona del filo de Los Trozos en Anorí, las 230 personas que salieron desplazadas de ese territorio tratan de sobrellevar la angustia en los albergues acondicionados en la casa de víctimas y la cárcel municipal, donde están recibiendo la ayuda humanitaria, alimentación y hospedaje, además de atención en salud y psicológica.
CARACOL RADIO conversó con una líder social de Anorí, quien también está desplazada. Salió del caserío con otras 78 personas de unas de las cinco zonas porque sintieron que sus vidas estuvieron en riesgo durante los fuertes combates entre las disidencias y el Clan del Golfo.
“Hace 20 años que no se veía un desplazamiento de estos en este municipio por parte de los grupos armados. Nosotros ya tomamos la decisión de salir por los enfrentamientos entre los grupos que se encuentran en la vereda, por disparos y todo eso, y artefactos que sonaban muy cerquita; entonces a nosotros nos dio temor por un fuego cruzado, entonces tememos por la vida de cada uno de nosotros”.
Pero también hubo otro hecho de intimidación directa contra la fuente que generó temor a la comunidad, lo que también los impulsó a desplazarse ante el asedio de uno de los grupos ilegales en confrontación.
“A mí me llegó un informe de que el Clan del Golfo me mandaba muchos saludos y me mandaba a decir que quería trabajar con nosotros. A mí por ese lado me dio mucho susto y entonces tomamos la decisión de que era mejor salir”, aseveró a CARACOL RADIO.
Le puede interesar:
Encapuchados quemaron un carro de la secretaría de Movilidad en el ‘Poli’
Denuncian atraco masivo en Entrerríos; 22 personas fueron secuestradas durante 10 horas
Lo que más les preocupa ahora que están en el pueblo desplazados son los animales de corral y de potrero, como los caballos y ganado que dejaron a la intemperie que debido a los combates huyeron de los de las fincas. Lo mismo que los cerdos y las mascotas. Eso los tiene muy inquietos. Dice que ella y sus coterráneos están a la espera de poder retornar, pero para ello solicitan garantías de seguridad por parte del Estado.
“La seguridad, más que todo, primeramente, la seguridad de todos nosotros, los campesinos, porque nosotros los campesinos somos los que diario pagamos los platos rotos de los grupos armados”.
Indica que para retornar también se debe adelantar un desminado en el territorio porque los caminos quedaron minados.
“Y ya no podemos decir que ya vamos a andar con la misma confianza que andábamos, no, porque ya sí, nos dijeron que estaban minados hasta incluso los caminos”.
La situación es más compleja porque la economía de esa zona de Anorí se basa en la ganadería de leche, especialmente, y de carne, además de cultivos de pan coger y ahora no saben cómo harán para retomar con seguridad esas labores agrarias.