CAR y Corpochivor unen fuerzas para proteger el río Garagoa y sus recursos hídricos
Inversión de $ 2.800 millones impulsará proyectos ambientales y gestión de recursos
Tunja
En un esfuerzo conjunto, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) y la Corporación Autónoma Regional de Chivor (Corpochivor) han establecido una alianza estratégica destinada a proteger y preservar la cuenca del río Garagoa. Esta colaboración, formalizada durante la COP 16 en Cali, tiene como objetivo fortalecer la gestión de los recursos hídricos, respaldada con una inversión de $ 2.800 millones.
Los proyectos que se pondrán en marcha bajo esta alianza están orientados a mitigar los riesgos asociados a fenómenos hidroclimáticos que afectan a la cuenca. El primero de estos proyectos busca desarrollar una matriz de análisis de amenazas, vulnerabilidad y riesgos climáticos. Con esta herramienta, se podrán identificar eventos que puedan impactar de forma física, social, económica y ambiental la región, brindando información crucial para planificar acciones preventivas y mejorar la respuesta ante crisis ambientales. El segundo proyecto se centra en la formulación de un plan de manejo de acuíferos, con el fin de identificar y priorizar áreas con recursos hídricos subterráneos que puedan ayudar a enfrentar situaciones de escasez de agua. Este plan será una respuesta a la crisis de disponibilidad de agua que ha afectado a la región, una problemática que el director de Corpochivor, Fabián Bulla Sánchez, destacó como urgente: «queremos identificar los problemas que afectan esta cuenca compartida y buscar soluciones sostenibles, especialmente en momentos en que el abastecimiento de agua es cada vez más limitado».
Alfred Ballesteros Alarcón, director de la CAR, expresó que la alianza «refleja nuestro compromiso con la gestión integral del agua como elemento esencial para la conservación de la biodiversidad». Asimismo, Luis Felipe Lota, director de la Región Metropolitana y miembro del Consejo Directivo de la CAR, resaltó la importancia de este trabajo colaborativo para enfrentar los efectos de la variabilidad climática, especialmente en ecosistemas estratégicos como los de la cuenca del Garagoa.