Tres personas fueron secuestradas del corregimiento de San Félix en Bello, Antioquia
El hecho ocurrió la semana anterior en ese corregimiento que comunica con la vecina población de Sa Pedro de los Milagros.
Imagen de referencia de secuestro. Foto: Getty Images / KRUMANOP
Bello, Antioquia
El pasado miércoles 28 de agosto tres personas fueron retenidas a la fuerza en zona rural del corregimiento de San Félix, municipio de Bello, norte del Valle de Aburrá. Un grupo de al menos ocho personas fuertemente armadas y sin capuchas realizaron el secuestro a las víctimas y por una lograron que sus familiares pagaran hasta 2 millones de pesos.
Caracol Radio conoció que el miércoles de la semana pasada un hombre acordó con otro adulto asesorarlo en la compra de maquinaria y por ello quedaron en verse en zona rural de la zona. Al sitio llegaron dos personas, el comparador de la maquinaria acompañado de una mujer y la tercera persona que llegó en moto. Cuando se disponían a dirigirse al sitio para analizar la posible compra, fueron interceptados por el grupo de delincuentes que se identificaron como presuntos integrantes del Clan del Golfo, llevados a una parte boscosa y solitaria donde recibían todo tipo de intimidaciones. Cuenta la denuncia que los ilegales ultrajaron física y verbalmente a los tres retenidos.
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Al hombre contactado para asesorar al comprador le dañaron la moto en la que se movilizaba, e incluso amenazaron con quemársela. Los delincuentes contactaron a la familia del hombre que serviría como asesor en el negocio y le exigieron a su padre 15 millones de pesos, ante la negativa del familiar sobre el pago de alta suma de dinero porque no contaba con ella, negociaron en dos millones los mismos que fueron pagados.
Las tres personas retenidas fueron separadas; el que servía como asesor quedó solo y el comprador y la mujer con la que había llegado al lugar en otro lado. Allí permanecieron alrededor de cuatro o cinco horas, hasta que luego fue liberado. No sabe qué ocurrió con la pareja.
El hombre quedó bastante asustado por la situación que vivió, ya que los ilegales tuvieron acceso a números de su familia y hasta conversaron con ellos exigiendo dinero.
