¿De qué manera se pueden clasificar residuos plásticos mediante un juego?: Polyasket
El próximo 22 de agosto se jugará el primer partido oficial que implementa esta metodología que busca contribuir al desarrollo sostenible.
Referencia reciclaje plastico. Foto: Getty Images / Sami Sert
Cada vez cobra más importancia el desarrollo sostenible dentro de las agendas de los países del mundo. Por medio de la sostenibilidad ambiental, los colombianos pueden promover el desarrollo económico, pero sin amenazar, ni degradar el ambiente.
En este orden de ideas, el Ministerio de Ambiente, en el marco de los preparativos de la COP16, reconoció el ‘Polyasket’ como una metodología eficaz para la difusión del conocimiento sobre la preservación del medio ambiente y la biodiversidad.
¿A qué nos referimos cuando hablamos de Polyasket?
El semillero ‘Sidisplast’ de la Universidad ECCI, diseñó esta metodología de educación ambiental para enseñar a los niños y jóvenes sobre la correcta clasificación y reutilización de residuos plásticos, todo mientras participan en un juego competitivo y entretenido.
La esencia del juego está en que los participantes, además de intentar encestar la pelota en la canasta, deben clasificar correctamente residuos plásticos post-consumo como parte integral de la competencia.
El encuentro dura cuatro tiempos de nueve minutos cada uno, con dos equipos de cinco jugadores. Es similar al baloncesto, pero con siete canastas diferentes para materiales reciclables (PET, HDPE, PVC, LDPE, PP, PS y otros).
En el juego, un juez principal sanciona las faltas y un juez auxiliar verifica la correcta clasificación de los desechos. En lugar de simplemente sumar puntos por encestar, los jugadores tienen la oportunidad de ganar puntos adicionales al clasificar correctamente los residuos plásticos que se encuentran en una canasta central.
Cuando un jugador encesta y anota dos puntos, puede tomar un residuo plástico de la canasta central y, si lo clasifica correctamente en una de las canastas designadas, su equipo obtiene un punto adicional.
Si encesta desde fuera del área, lo que normalmente otorgaría tres puntos, tiene la posibilidad de clasificar dos residuos, sumando hasta seis puntos adicionales si acierta en ambas clasificaciones.
Por medio de la conciencia ambiental se pueden minimizar los impactos al medio ambiente mientras se mantiene la calidad de vida. Ante el reconocimiento del Minambiente, se espera que esta metodología pueda ser implementada en más instituciones educativas a nivel nacional.
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¿Cómo se espera consolidar esta metodología para ampliar su alcance e impacto?
El próximo jueves 22 de agosto, los colegios Guillermo Cano Isaza y Ofelia Uribe de Acosta, de Bogotá, jugarán el primer partido piloto de ‘Polyasket’, marcando un paso importante en la educación ambiental en Colombia.
Con el tiempo, la Universidad ECCI espera que el ‘Polyasket’ se expanda a más colegios en Colombia y el mundo, convirtiéndose en un pilar de la educación ambiental y capacitando a futuras generaciones en la lucha contra la contaminación plástica.
El ‘Polyasket’ busca formar jóvenes conscientes de la gestión de residuos y su impacto ambiental. Se espera que los estudiantes lleven estos conocimientos a sus comunidades, promoviendo prácticas sostenibles e inspirando a otras instituciones a adoptar enfoques similares mientras aumentan las cifras de aprovechamiento de los residuos sólidos que desecha la ciudad.
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