Acurrucarse en pareja; ¿es bueno o malo para la relación? Psicólogos responden
Diferentes expertos han estudiado los efectos de tener esta posición al descansar en pareja y para algunos puede ser “todo un problema”.
Una de las posiciones más comunes que se hace al dormir o al recostarse a ver televisión en pareja es la de acurrucarse, la cual consiste en encogerse hacia un lado. Aunque a lo largo de los años, diferentes expertos han mencionado que los roces y el contacto con la piel libera oxitocina, la llamada ‘hormona del amor’, y esto puede generar una sensación de bienestar, nuevos profesionales han entrado en conflicto para afirmar lo anterior.
La Dra. Sarah Hunter Murray del sitio especializado ‘Psychology Today’, quien ha dedicado más de 10 años a entender las complejidades y sutilezas del deseo sexual, enfocó uno de sus artículos en el análisis que ha hecho frente a si es bueno o malo para la relación, que una pareja se acurruque con frecuencia.
¿Es malo acurrucarse en pareja?
Por un lado, la psicoterapeuta Esther Perel señala en su libro ‘Aparearse en cautiverio’ que acurrucarse puede convertirse en “un estorbo para la pasión erótica”, tanto que recomienda a las parejas que desean incrementar la pasión sexual, evitar esta posición con frecuencia.
Según argumenta, es porque ocurre una conexión emocional que los hace sentir demasiado cercanos y familiares, razón por la que es poco probable que incite sentimientos lujuriosos.
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¿Es bueno?
Por otro lado, John Gottman, otro líder de la investigación de las relaciones, sugiere que basado en su experiencia estudiando las vidas íntimas de las parejas, acurrucarse hace parte de la lista de 13 cosas que hacen aquellas personas que tienen una vida sexual activa con la persona que viven.
El experto considera que la conexión y cercanía que logra acurrucarse lleva a tener encendida la llama del amor.
Acurrucarse antes de tener relaciones sexuales
Sin embargo, la Dra. Sarah Hunter Murray, basándose en entrevistas que ha hecho a cientos de hombres y mujeres para sus investigaciones, acurrucarse actúa de manera diferente.
Para las mujeres, resulta ser una ayuda para lograr un mayor deseo sexual, de cierto modo, es tener una previa antes del encuentro sexual. Por el lado de los hombres, la experta, concluyó que la mayoría descubre que sus urgencias sexuales aparecen espontáneamente.
Así las cosas, puede que acurrucarse sea un potenciador del deseo. Pero no quiere decir que siempre deba ser motivo que lleve al sexo. Pues “es importante que las parejas románticas se tomen el tiempo de “solo” abrazarse, “solo” besarse y “solo” acurrucarse”, explica la especialista.
Tener esta posición después del acto sexual puede generar beneficios, según una investigación citada por la experta y realizada por Amy Muise, junto a otros colegas, a 500 participantes, encontraron que mientras más tiempo le dedicaban las parejas al efecto post sexual, más satisfacción sentían con su relación y con el sexo. Tanto para mujeres, como para hombres.
Hunter concluye lo siguiente: “acurrúquense a discreción y háganlo con frecuencia. Si acurrucarse lleva al sexo, qué bien, pero asegúrense de acurrucarse y tocarse muchas veces más de maneras no sexuales. Solo por el placer de sentirse”.