Tras su venidera salida de São Paulo en el fútbol brasileño, James Rodríguez busca nuevo equipo, para cuando termine la Copa América en Estados Unidos, y con ello pueda continuar con su carrera profesional. Con 32 años en su espalda, el colombiano ha pasado por nueve equipos desde su debut internacional con Banfield de Argentina (en Colombia lo hizo con Envigado).

Los rumores parecían indicar que el colombiano volvería al fútbol español, fichando para el Celta de Vigo, equipo que terminó en la casilla 13 de la primera categoría del balompié ibérico. Sin embargo, España como destino del cucuteño parece verse muy distanciado debido a la situación económica del club y el consecuente salario que devenga el futbolista.

Diego Otero, periodista español que cubre al equipo de Vigo, expresó que el regreso del colombiano es improbable de acuerdo con la realidad de los celestes. El tope salarial que mantiene el equipo español no le permitiría sumar un jugador como James con esos gastos mensuales.

“James tiene un salario muy alto y Celta tiene problemas con el límite salarial. Sería prácticamente imposible, salvo que exista una rescisión de contrato del colombiano. Doy un 2 % de posibilidades de que pudiera fructificar de cara a Vigo”, expresó.

James, en curva de descenso

De acuerdo con Otero, el rendimiento personal del colombiano en los últimos años no ha sido el mejor ni el esperado, debido a los constantes cambios de equipos y la irregularidad en cada club. Este peso no parecería interesar y el panorama se la complicaría al colombiano en la búsqueda de su nuevo destino.

“La imagen de James en España quedó muy debilitada por su segundo paso en el Real Madrid. Aquí tenemos el pensamiento que es un gran jugador, con un talento brutal, que ya no está para competir al máximo nivel como pasó en un equipo como São Paulo. Creo que ningún equipo estaría dispuesto a pagar una ficha tan alta por un jugador que no ha tenido un rendimiento tan alto para cobrar esas cantidades”

Desde que llegó al equipo brasileño, el colombiano ha jugado en 22 partidos, de los cuales suma 969 minutos en cancha, anotando dos goles y generando cuatro asistencias. Su último duelo fue el lunes 29 de abril, en la cuarta fecha del Brasileirão ante Palmeiras, el cual finalizó 0-0.