Mancuso responde a acusaciones de Álvaro Uribe:“mi objetivo aquí no es su judicialización”

La llegada de Salvatore Mancuso y su posterior libertad mientras trabaja como gestor de paz, ha generado un sinsabor en varios políticos colombianos, entre ellos en el expresidente Álvaro Uribe, quien rechazó las afirmaciones del exlíder paramilitar sobre supuestas reuniones que habría tenido con él y sus vínculos con el paramilitarismo en Colombia.

Pero Mancuso no se quedó callado y envió una carta al expresidente Uribe para aclarar que nunca ha llamado a nadie para orientar versiones en su contra, ni para intervenir en procesos judiciales como los que incurren en “enviar a terceros a inducir falsos testimonios”. Reiteró que eso no hace parte de sus hábitos, porque queda claro que “la opinión pública sabe quien, entre usted y yo, recurre a esas turbias prácticas”.

En la carta, Mancuso aclara que su objetivo no es buscar la judicialización del expresidente, y señala que lo que tiene Uribe es una especie de temor infundado porque los colombianos saben quien fue en la época de las Autodefensas. Asegura que lo que sabe sobre el vínculo de Uribe con el paramilitarismo ya lo dijo, y que ha sido más que suficiente para corroborar que durante años y cuando fungió como gobernador de Antioquia y en el primer mandato presidencial: “hubo connivencia, cooperación y un proyecto contra insurgente compartido entre las instituciones que usted lideraba y las AUC”.

Mancuso finaliza la carta recordándole a Uribe que el actuar de alertar sobre complots es un hábito que realizaron en conjunto durante su gobierno, y que conoce perfectamente sus intenciones de “crear las condiciones propicias para que otro haga el trabajo sucio”. Por lo que le pide públicamente que cese su campaña de alentar un linchamiento social y de volverlo un “objetivo militar”.