Según la IA así se verán los gatos dentro de 1000 años: ¿serán modificados genéticamente?

Los gatos son esos animales que encantan a más de uno por su peculiar personalidad de fortaleza, independencia, curiosidad, timidez, entre otras características que los vuelven únicos; además, desde hace unos años son considerados como la compañía ideal por la forma de demostrar amor y cariño hacia sus cuidadores.

Sin embargo, no siempre fueron así, pues su proceso evolutivo para ser domesticados estuvo permeado por la “selección artificial que tuvo lugar en el siglo XIX”, explica National Geographic, convirtiéndolos con el pasar del tiempo en lo que actualmente conocemos, pero ¿permanecerá así en unos mil años?

¿Cómo se verán los gatos en mil años, según la inteligencia artificial?

Aunque es una pregunta imposible de responder con el conocimiento que tenemos en la actualidad, gracias a los avances de la inteligencia artificial generativa y a su sistema de probabilidades, Gemini [antiguamente Bard], IA desarrollada por Google, podría darle una solución no solo a esta, sino a más preguntas.

De acuerdo con lo explicado, para conocer cómo se verían los gatos en mil años es necesario tener en cuenta diferentes factores como “la selección artificial, el cambio climático y la evolución natural”, señala. Según lo explicado, si el calentamiento global aumenta demasiado, los gatos podrían tener un pelaje más corto y ligero con el objetivo de disipar el calor; pero, si la temperatura desciende considerablemente, “podrían desarrollar pelaje más largo y denso para mantener el calor”, agregan.

Continuando, las personas estarían en la capacidad de criar gatos con características específicas, es decir, indicar cuál tamaño les gustaría, el tipo de pelaje, el comportamiento e incluso la inteligencia; además, sería posible crear nuevas razas de estos animales con peculiaridades únicas jamás vistas.

Frente a la evolución natural, estos seres vivos tendrían la forma para desarrollar nuevas habilidades o destrezas que les permitiría adaptarse a su entorno; por ejemplo, “crear una visión nocturna o un mayor sentido del olfato”, afirma Gemini. Y, anclado a lo anterior, la tecnología jugaría un papel crucial porque se usaría para implantarles dispositivos que les brinden nuevas capacidades o modificarlos genéticamente; en tal caso, los gatos podrían ser hipoalergénicos, tener una mayor resistencia a las enfermedades y ser bioluminiscentes, en otras palabras, brillar en espacios oscuros.

Asimismo, existe una alta posibilidad de que los gatos aprendan a comunicarse con las personas por medio de dispositivos como aplicaciones y así saber cuándo sienten dolor, quieren algo o les incomoda alguna acción realizada; asimismo, se estimaría que por esa misma época controlen objetos con la mente.

¿Es posible que los gatos se extingan en unos años?

Gemini asegura que la probabilidad es realmente baja porque los gatos “son una especie adaptable y resistente que ha sobrevivido durante miles de años”; sin embargo, los factores que podrían amenazar su existencia serían:

• La generación de nuevas enfermedades mortales que no tengan tratamiento.
• La deforestación y urbanización reduciría considerablemente el espacio que tienen los gatos salvajes.
• La existencia de más depredadores.
• Que una parte importante de su población sea envenenada a causa de sustancias químicas.

Es relevante mencionar que estas son predicciones hechas por la inteligencia artificial, por lo tanto, no existe una certeza para conocer realmente qué pasará en un futuro con los gatos.