El angustiante relato de un héroe que combate las llamas en los Cerros de Bogotá
Carlos Cuervo, bombero del Cuerpo Oficial de Bomberos de la capital, narró en los micrófonos de 6AM detalles de las labores que adelantan los organismos de emergencia en los cerros Orientales para controlar los incendios forestales
Desde el pasado lunes 22 de enero, las autoridades distritales y organismos de socorro de Bogotá han atendido al menos cinco incendios forestales en diferentes partes de la capital.
Miembros del Cuerpo Oficial de Bomberos, el Ejército Nacional y la Defensa Civil han adelantado arduas jornadas para controlar las llamas que han afectado al menos 20 hectáreas de bosques nativos sobre los cerros Orientales.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos a los que se han sumado cuatro aeronaves, que han realizado decenas de descargas diarias, aún persisten puntos calientes en los sectores conocidos como la quebrada La Vieja y el cerro El Cable.
En 6AM HOY por HOY de Caracol Radio, Carlos Cuervo, miembro del Cuerpo Oficial de Bomberos de la capital, compartió el angustiante relato de la manera en la que los miembros de los organismos de socorro arriesgan su vida para controlar las conflagraciones atizadas por el fenómeno de El Niño.
Este es un incendio forestal completamente diferente
Cuervo, quien cumplirá 17 años de servicio durante este 2024, resultó herido en medio de las labores de control que se adelantan en el cerro El Cable, la zona más afectada por las llamas y aún permanece activa.
“Hemos estado en ocasiones donde hemos visto la luz al final del túnel, pero en este incendio forestal nos hemos dado cuenta de que es completamente diferente a cualquier otro que hayamos enfrentado antes. Este incendio ha sido bastante complejo”, aseguró el bombero.
Cuervo, quien cumplirá 17 años de servicio durante este 2024, detalló que el clima ha sido determinate en el comportamiento de esta conflagración, explicando que los vientos cambian la situación de un instante a otro.
A su vez, explicó que uno de los mayores inconvenientes para combatir las llamas ha sido el difícil acceso que se presenta en algunos sectores de los cerros Orientales, donde los organismos de socorro tienen que sortear desde paredes de piedra hasta afluentes.
“Es muy diferente lo que se logra ver dese la calle a estar frente a frente con el fuego. Es un infierno total”, detalló Cuervo, quien explicó el esfuerzo que representa llegar a los puntos calientes y los riesgos que se enfrentan en medio de la lucha contra las conflagraciones.
De igual manera, explicó que el tiempo es valioso a la hora de adelantar estas labores de control de los incendios, debido a que las llamas avanzan de una forma voraz producto de los vientos.
El cerro El Cable
Cuervo contó que, junto a su cuadrilla, fue uno de los primeros en llegar hasta el filo del cerro El Cable, donde las llamas amenazaban las antenas que se encuentran en la cima.
“Empezamos a atacar con agua y herramientas forestales. Armamos lo que se conoce como una línea de ataque”, detalló el bombero; sin embargo, segundos después el terreno que se había debilitado en la parte alta se desplomó y una roca hirió a un compañero.
Minutos después, tras practicarle los primeros auxilios para descartar una posible fractura, iniciaron el descenso para llevar al herido hasta la parte baja de la montaña para su atención.
“Cuando habíamos bajado unos 100 metros de la cuchilla, desafortunadamente piso mal, se rueda una de las rocas y pierdo el equilibrio. Yo creo que caí entre tres y cinco metros. Los golpes que recibí fueron muy fuertes, en la rodilla izquierda y en el tobillo izquierdo”, narró.
“Según me dictaminaron, tuve daño en un ligamento, en la parte del tendón de Aquiles. Nosotros nos la estamos jugando todos los días y estamos dando el 100 % para apagar este incendio. Podemos perder la vida y aun así vamos a dar lo mejor de nosotros”, concluyó Cuervo.