Los Reyes Magos: ¿cuál es su origen e historia según los evangelios y quién los nombró?
El evangelio de San Mateo cuenta que unos magos llegados de Oriente fueron guiados por una estrella para que adoraran al rey de los judíos que acababa de nacer
Según recoge el Evangelio, según San Mateo (2:1-2), los Reyes Magos eran los visitantes que llegaron a Belén para adorar al recién nacido Jesús de Nazaret. Por su parte, la palabra “Magos” es una transliteración del griego, del antiguo persa magus (“poderoso”) como referencia a los sacerdotes zoroastrianos del posterior Imperio persa. Entre tanto, también eran conocidos como famosos astrólogos que intentaban comprender la relación de los poderes del universo con los humanos.
Pasando a otro contexto, Heródoto, el famoso historiador y geógrafo griego, dijo en su momento que los Reyes Magos eran originalmente los aristócratas de Media, que estaban dotados para la interpretación de los sueños.
Ahora bien, con la difusión del helenismo, periodo de la cultura griega que se inicia con Alejandro Magno, que se caracterizó por la absorción de elementos de las culturas de Asia Menor y de Egipto, la palabra magos terminó convirtiéndose en un adjetivo; magas techne, o ars magica en latín, se refería a conocimientos de astrología y rituales mágicos. Sin embargo, más allá de todo esto, queda otras duda sobre cuál ha sido su papel en la historia.
Puede interesarle
¿Cuál es el origen de los Reyes?
Como se mencionaba anteriormente, la única referencia a dichos personajes aparecen en el Evangelio de San Mateo, donde cuenta que unos magos llegados de Oriente fueron guiados por una estrella para que adoraran al rey de los judíos que acababa de nacer y al enterarse de la noticia, Herodes el Grande, que en ese entonces era el rey de Judea, los llamó para interrogarlos.
La Biblia describe a Herodes como un “monstruo”, ya que estuvo de la atroz orden de ejecutar a los niños nacidos en Belén con el propósito de acabar con Jesús.
Como es de conocimiento general, al abandonar su palacio, fueron guiados por la estrella y terminaron encontrando al menor en un establo en Belén, junto a María y José y al postrarse ante él y ofrecerle oro, incienso, y mirra. Este hecho se vincula, tanto a la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo) como al número de regalos que entregaron.
La Edad Media puso nombre a los tres reyes
Por su parte, el origen de los Reyes Magos tal como se conocen en la actualidad se remonta a una tradición medieval que los “bautizó” con los nombres de Melchor, Gaspar y Baltasar. Estos aparecieron por primera vez en el mosaico del siglo VI en la basílica de San Apolinar el Nuevo en la ciudad de Ravena, en Italia.
Según un manuscrito del siglo XIII, se creía que podían proteger contra la epilepsia, y solamente era necesario rezar una breve oración al oído de un enfermo pronunciando el nombre de los tres Reyes para curarlo. En algunas partes de Europa, el día 6 de enero se inscribían sus iniciales, GBM, en todas las puertas de las casas y en los establos para salvaguardar a las personas y a los animales contra el ataque de demonios y brujas.