Sobras de comida: recaliéntelas y viva para contarlo

Las estadísticas son realmente alarmantes: Alrededor del 17 por ciento de la cantidad total de alimentos producidos en el mundo se desperdicia, es decir, más de 930 millones de toneladas de alimentos, según un informe del Índice de Desperdicio de Alimentos del PNUMA de 2021, y la mayor parte de ese desperdicio (61 por ciento) se produce en nuestros hogares.

Esto es escandaloso porque, al mismo tiempo, 3.100 millones de personas en el planeta no pueden permitirse comprar o cocinar alimentos para una dieta saludable para ellas y sus familias.

El despilfarro de comestibles es también una cuestión de derroche de recursos mundiales: agua, tierra y electricidad, por ejemplo, que se utilizan en la producción de alimentos.

Las fiestas son famosas por los excesos y las sobras. Muchas de ellas acaban en el frigorífico, olvidadas hasta que se estropean por las bacterias y el moho, tras lo cual van a dar a la basura.

Pero con unos sencillos consejos, puede disfrutar de su comida festiva, reduciendo al mismo tiempo el desperdicio de alimentos, y sin intoxicarse en el proceso.

¿Qué es el desperdicio de alimentos?

El desperdicio de alimentos se produce en todas las fases de la cadena alimentaria - “de la granja al tenedor”-, pero la mayor parte tiene lugar en los hogares: usted y yo desperdiciamos más del 54 por ciento de los alimentos, el 7 por ciento se pierde en la venta al por mayor y al por menor, y el 9 por ciento en restaurantes y servicios de comidas. En total, eso equivale a 131 kilogramos por persona y año.

¿Cómo puedo reducir el desperdicio de alimentos?

La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación tiene una exhaustiva lista de 15 consejos para evitar el desperdicio de alimentos. He aquí algunas ideas útiles:

Compre solo lo que necesite: Requiere un poco de planificación, pero merece la pena.

Entienda la diferencia entre “consumir preferentemente antes de” y “consumir antes de”: Si un alimento ha superado la fecha de caducidad, no lo consuma; o dicho de otro modo, si compra algo cuya fecha de caducidad está próxima, asegúrese de que puede consumirlo mientras sea seguro. Y si la leche ha superado su fecha de consumo preferente, huélela para determinar si está pasada.

Guarde las sobras: Utilice recipientes herméticos para mantener frescos los alimentos sin envasar en el frigorífico y asegúrese de que los paquetes están cerrados para conservar los alimentos frescos durante más tiempo y evitar que entren insectos.

Coma las sobras, pero de forma segura: Las sobras pueden congelarse o “remezclarse” en un plato para el día siguiente. Solo tiene que asegurarse de que, al hacerlo, recaliente la comida sobrante lo suficiente para matar las bacterias. Si recalienta un plato, pero no se lo acaba, tire el resto. Solo debe recalentar la comida una vez.

Donación de alimentos: Compartir es cuidar: done comida a amigos o vecinos.

¿Cómo puedo reutilizar de forma segura los restos de comida?

Cocinar las sobras es la mejor manera de matar cualquier hongo o bacteria que pueda causar enfermedades transmitidas por los alimentos. Cuando se trata de alimentos cocinados, el consejo general es que las sobras se consuman en un plazo de tres a cuatro días. La refrigeración no detiene el crecimiento de bacterias y hongos, solo lo ralentiza.

Hay dos tipos de organismos que provocan la descomposición de los alimentos: las bacterias patógenas que causan intoxicaciones alimentarias, y las bacterias del deterioro y otros organismos que hacen que los alimentos desarrollen malos olores, sabores y texturas.

Tanto si es la primera vez que cocina un plato como si va a recalentar las sobras, cocine siempre bien los alimentos. No hay por qué quemarlos. Después, ¡siéntese y disfrute!