Jerusalén: ataque palestino deja tres personas muertas y seis heridas
Las autoridades israelíes confirmaron que dos hombres palestinos son los responsables del tiroteo en una estación de bus en el este de Jerusalén.
Una mujer de 24 años, un hombre de 73 y una mujer de unos 60 años murieron este jueves en un ataque palestino con disparos en uno de los accesos a Jerusalén, donde otras seis personas resultaron heridas, tres de ellas aún en estado crítico, confirmó la Policía.
La Policía confirmó que los dos atacantes, dos residentes palestinos de Jerusalén Este, murieron en el lugar de los hechos tras ser “neutralizados” por dos soldados que estaban fuera de servicio y un civil armado.
La joven de 24 años fue declarada muerta en la escena del ataque, en la rotonda de Givat Shaul, mientras que las otras dos víctimas fueron declaradas muertas en el hospital Shaare Tzedek, donde los servicios de emergencia llevaron a los heridos críticos, mientras que el resto fueron trasladados al Hadassah Ein Kerem.
“Dos terroristas armados que llegaron al lugar en un vehículo, dispararon contra civiles en la parada de autobús y fueron neutralizados por soldados y un civil que se encontraba en las cercanías”, informó un portavoz policial.
El ataque se llevó a cabo con una pistola y un rifle M-16 y se encontraron múltiples cartuchos y municiones en el vehículo.
La Policía indicó que, bajo el mando del comisario de Jerusalén, Doron Turgeman, y del jefe de la Policía de Israel, Yaakov Shabtai, quienes visitaron el lugar de los hechos, ya se ha abierto una investigación preliminar.
Desde que comenzó la guerra en Gaza el 7 de octubre contra el grupo islamista Hamás, Israel ha intensificado aún más sus redadas para detener “sospechosos de terrorismo” en Cisjordania ocupada, donde han muerto al menos 247 palestinos desde esa fecha en enfrentamientos violentos con soldados israelíes, incluidos 9 asesinados por colonos.
La Sociedad de Presos Palestinos asegura que Israel ha detenido a más de 3.200 palestinos en Cisjordania, incluido Jerusalén este, desde el 7 de octubre; aunque lasa tropas israelíes reducen esa cifra a unos 1.800, de los que unos mil alegan que tienen “vínculos con Hamás”.
Cisjordania vive su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-05) y este 2023 ya han muerto 455 palestinos, la mayoría milicianos en enfrentamientos armados con tropas israelíes y atacantes, pero también civiles, incluidos más de un centenar de menores.
De hecho, un joven palestino de 21 años murió esta madrugada por los disparos recibidos en choques con tropas israelíes en la localidad de Beitunia, en Cisjordania cerca de Ramala, a donde llegan los presos palestinos liberados desde la cercana cárcel de Ofer por el acuerdo de tregua entre Israel y Hamás.