En Cartagena dos niños cumplieron sueño de ser marinos

Cartagena

“Ser Marinos de Colombia” un sueño plasmado en una carta conocida por la Armada de Colombia dio inicio a esta bella travesía; dos menores, Juan Diego de nueve años y Kevin de catorce, narraban allí su gran sueño, en momentos difíciles de salud.

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Muy temprano, los dos menores iniciaron su día en la ciudad de Bogotá, algo diferente a su rutina diaria; todo se desarrolló de manera rápida y no lograban entender el motivo de tanto movimiento y alistamiento a su alrededor.  Sus padres y los integrantes de la Fundación se encontraban prestos para apoyar cada movimiento requerido.

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El aeropuerto “El Dorado” fue el lugar del encuentro, la emoción ya se apoderaba de estos pequeños ya que era la primera vez que subían a un avión, el vuelo fue muy rápido y sin mayores contratiempos llegaron a su destino, Cartagena, la ciudad heroica habría sus puertas para recibirlos.

Marinos de la Armada de Colombia los esperaron a su arribo para llevarlos a la principal unidad de la Institución Naval, la Fuerza Naval del Caribe, donde su comandante el Vicealmirante Hernando Mattos les dio la bienvenida para iniciar su aventura, por fin cumplirían su gran sueño “ser Marino” de la Armada de Colombia.

La experiencia inició con un recorrido en el Aviario Nacional, en donde las aves más representativas del Caribe colombiano les dieron la bienvenida a tierras cartageneras. La siguiente parada, una de las más emotivas fue en el Oceanario de Islas del Rosario, en donde nuestros dos visitantes tuvieron su primer encuentro con el mar, disfrutando sus aguas y nadando junto a los divertidos delfines.

Al fin su más grande sueño se hizo realidad, pues la Base Naval Logística No.1 ARC “Bolívar” les abrió sus puertas para que vivieran el diario vivir de los marinos de Colombia en las unidades a flote y submarinas, aprendiendo las tradiciones navales que por años se han transmitido de generación en generación y conociendo en cada uno de sus componentes las capacidades con los que cuenta la Armada de Colombia en esta región del país.

Por fin su gran sueño se había cumplido y todo gracias a la articulación de esfuerzos entre la Armada de Colombia, el cuerpo de Profesionales Oficiales de la Reserva Naval, la Fundación Janssen de Jhonson y Jhonson, la Fundación Doctor Sonrisas, el Hotel Intercontinental, el Aviario Nacional de Colombia y el Oceanario Islas del Rosario.

Con cansancio en sus cuerpos pero con alegría inmensa en sus corazones, los nuevos “Marinos” honorarios de la Armada retornaron a Bogotá, no sin antes despedirse de cada uno de los tripulantes de la Armada de Colombia, quienes acompañaron cada paso para el cumplimiento de su sueño.