Bogotá D.C

Caracol Radio conoció en primicia un auto de 73 páginas del Tribunal Administrativo de Cundinamarca con el cual se paraliza la licitación para la construcción de la planta de tratamiento de aguas residuales (Ptar) de Canoas, un ambicioso proyecto que pretende descontaminar el río Bogotá.

Resulta que la magistrada Nelly Villamizar echó para atrás la estructuración técnica y financiera de la mega obra que había realizado el Acueducto de Bogotá (EAAB) bajo la gerencia de Cristina Arango, quien renunció a su cargo el pasado 26 de junio.

Lo anterior consistía en construir la planta como unidad funcional para que opere desde el año 2035. Sin embargo, el Tribunal ha advertido que con ese modelo se continuarían vertiendo al río sin tratar el 70% de las aguas residuales de Bogotá y las del municipio de Soacha por 10 años más, afectando a las poblaciones de la cuenca baja.

Según indicó la magistrada, la empresa de Acueducto alteró el convenio firmado en 2019 con la Corporación Autónoma Regional (CAR) de Cundinamarca y la Gobernación el cual, contrario a lo que estructuró Arango, determinaba que la construcción de la Ptar Canoas se haría en dos fases funcionales.

De hecho, ya se habían pagado 16 mil millones de pesos en diseños y estudios, pero no fueron tenidos en cuenta por la administración de la exgerente. Para el Tribunal, cambiar la estructuración del proyecto fue una decisión unilateral del Acueducto que afectó el cumplimiento del fallo del Consejo de Estado de 2014 sobre la descontaminación del río Bogotá.

“Ciertamente, pueden existir razones gerenciales, administrativas, financieras o técnicas que lleven a la EAAB a efectuar estos cambios sustanciales frente a lo que se firmó en el Convenio 1832 de 2019 con la CAR Cundinamarca, pero esa Empresa no puede olvidar que el elemento prevalente respecto a esas razones es que se debe actuar prontamente para hacer cesar progresivamente la afectación ambiental al río Bogotá”, dice el auto.

Por todo lo anterior, el Tribunal de Cundinamarca ordenó de manera inmediata rehacer la estructuración técnica y financiera del proyecto Ptar Canoas para que se construya en dos fases antes de sacar a licitación para la adjudicación de esta mega obra.

Asimismo, le pidió a la CAR de Cundinamarca “abstenerse de girar los recursos del 50% de la sobretasa ambiental del impuesto predial que el Distrito Capital de Bogotá gira al presupuesto de la Corporación mediante la apropiación de vigencias futuras que condujeron al cierre financiero de esa obra”, hasta que no inicie la construcción de la primera fase de tratamiento primario.

Licitación en suspenso

Por otro lado, la magistrada advirtió posibles fallas disciplinarias por abrir la licitación de la Ptar Canoas en marzo de 2023, en etapa de preclasificación, sin contar con el aval de la Nación para la línea de crédito que el Acueducto de Bogotá pretende obtener del Banco Mundial por USD 600 millones.

Como ya ha revelado Caracol Radio, el Ministerio de Hacienda no ha entregado dicho aval porque los cambios que realizó la empresa al proyecto Canoas nunca fueron informados, dificultaron el estudio que hace la cartera y generaron una incertidumbre técnica y financiera.

“El cierre financiero bajo el cual se soporta la licitación pública referida, le resta validez jurídica a la misma y que constituye una falta disciplinaria al adelantar las etapas de la licitación sin tener clara la apropiación presupuestal, que pone en riesgo de daño patrimonial a los invitados a esa selección al incurrir en gastos para presentar su propuesta”, señaló la magistrada en su auto.

Por lo anterior, el Tribunal de Cundinamarca aseguró que el director de Crédito Público del Ministerio de Hacienda puede dar la contragarantía solo si el Acueducto de Bogotá tiene listo el ajuste a la estructuración del proyecto, como ordenó este auto del 24 de Julio que reveló en primicia Caracol Radio. También advirtió al ministro Ricardo Bonilla que debe cumplir con esta orden o, de lo contrario, podrá incurrir en un desacato judicial.