Biotransformación de plásticos para el cuidado del medio ambiente
Se deben establecer criterios claros para el despliegue seguro de los plásticos biodegradables
La científica, investigadora y experta en biodegradación, Sofía Collazo Bigliardi, explicó en diálogo con Planeta Caracol desde Valencia en España, la importancia actual de implementar procesos de biotransformación para el tratamiento de los plásticos y garantizar el cuidado del medio ambiente.
Los plásticos biodegradables y los envases compostables surgen como alternativas a los plásticos convencionales, mientras que diferentes compañías en el mundo han volcado sus esfuerzos por el desarrollo de nuevas tecnologías las cuales permiten procesos de biotransformación que garantizan que el plástico se biodegrade en el medio natural de forma segura y rápida, sin dejar micro plásticos ni sustancias tóxicas.
Sofía Collazo indicó que “países como India, Malasia, Filipinas y Hungría le han ofrecido a la industria, desde la ciencia y la innovación, soluciones disruptivas que sustituyen al plástico convencional, protegen los recursos naturales, la salud humana y fomenten la competitividad”.
Colombia tiene el reto de avanzar en materia de protección del medio ambiente, su compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), es alinear de manera coherente acciones tanto públicas como privadas alrededor de este objetivo común.
El planeta ha llegado a un punto de inflexión que obliga a los gobiernos y a la comunidad a replantearse grandes soluciones, muchas de ellas recogidas en procesos de cambio y acciones de mejora continua para desarrollar, desde la ciencia y la innovación, tecnologías disruptivas que sustituyan al plástico convencional, protejan los recursos naturales y la salud humana y fomenten la competitividad de la industria.
El uso de plásticos sus efectos en la contaminación y el reciclaje son temas que se han priorizado a nivel mundial dadas las consecuencias para la salud humana y el medio ambiente. Actualmente en el mundo, el 32% de los envases de plástico no se recogen ni se reciclan, Colombia se enfrenta a un reto en cuanto a la reducción de contaminación plástica, especialmente en las regiones costeras, alrededor del 65% de los residuos sólidos terminan en los ecosistemas marinos, se calcula que el país genera anualmente entre 60 y 99 millones de toneladas de residuos plásticos mal gestionados.
En Colombia, el 65% de los residuos sólidos se gestionan de forma inadecuada, fluyen de la tierra a los ríos y acaban filtrándose a los océanos. De hecho, el 80% del plástico presente en los océanos del mundo tiene su origen en la tierra. Aquí es donde una solución biodegradable puede marcar la diferencia.
Sofía Collazo, señaló que “hay diferentes tipos de plásticos biodegradables, con soluciones existentes como los plásticos compostables que funcionan en un entorno controlado, así como nuevas formas que pueden hacer frente al reto en el medio natural. Se está desarrollando una nueva tecnología que ofrece dos escenarios de fin de vida, con reciclabilidad y biodegradabilidad trabajando juntas”.
La utilización de la amplia gama de soluciones disponibles actualmente en el ámbito de los plásticos biodegradables y compostables desempeñará un papel fundamental en la preservación de los diversos ecosistemas de Colombia.
Para Sofía Collazo Colombia debe desarrollar una hoja de ruta para la adopción de la tecnología de plásticos biodegradables/compostables en el país requiere un enfoque integral. Este es un momento de gran innovación en nuevos materiales y técnicas, por lo que Colombia tiene la oportunidad de incorporar estas nuevas tecnologías en su hoja de ruta.
El primer paso, que Colombia ya ha dado, es prohibir los artículos de plástico de un solo uso más contaminantes y ofrecer alternativas sostenibles como los plásticos biodegradables y compostables.
A continuación, deben establecerse criterios claros para respaldar el despliegue seguro de los plásticos biodegradables en el país. Cualquier tecnología que se utilice debe estar respaldada por normas internacionales creíbles, probadas en laboratorios acreditados.
Sofía Collazo destacó a Italia que ha invertido mucho en infraestructuras de compostaje industrial, por lo que tiene sentido adoptar esta solución en ese país. Malasia, por ejemplo, tiene altos índices de plástico filtrado, por lo que una tecnología que trabaje en el medio abierto sin crear microplásticos resulta eficaz en esa región. Muchos otros países han combinado las ventajas de las soluciones para vías de residuos gestionadas y no gestionadas a la hora de adoptar tecnologías.