¿Cómo funciona la maternidad subrogada en Colombia?
Sandra Milena cuenta su experiencia alquilando su vientre y asesorando a más mujeres en temas relacionados a esta práctica.
La falta de claridad en las reglas para el alquiler de vientres en Colombia, ha llevado a que se ponga en auge las ofertas de mujeres ofreciendo estos servicios por medio de redes sociales e internet.
La ‘maternidad subrogada’ o ‘alquiler de vientre’, se da cuando un embrión obtenido mediante la fertilización in vitro se implanta en el vientre de una mujer diferente a la ‘madre’ biológica, luego de mediar un contrato entre las partes.
En Colombia, la Corte Constitucional ordenó regular esta forma de reproducción asistida y precisamente, ad portas de cumplirse el plazo, el ministro de Justicia, Néstor Osuna, anunció que está listo el articulado de ley estatutaria que será entregado al Congreso en las próximas semanas para regular la maternidad subrogada.
“El propósito es acabar con ese mercado negro y establecer una regulación detallada, al establecer que está permitido, pero que no es negocio”, señaló el jefe de la cartera de Justicia.
Según el ministro, el proyecto de ley está dirigido a parejas o personas que no pueden tener un hijo de manera biológica natural y rechazan también la opción de la adopción. “Es decir, se trata de una persona sola, de una pareja conformada por personas del mismo sexo o si se trata de una pareja conformada por personas de distinto sexo que tenga imposibilidad para engendrar de manera natural”.
Sandra Milena, una mujer que trabaja refiriendo mujeres para alquiler de vientres, contó en 10Am Hoy por Hoy de Caracol Radio, cómo está funcionando esta práctica en Colombia, y cómo fue su experiencia, ya que ella misma alquiló su vientre el año pasado, y el bebé que dio a luz cumple ya dos meses de nacido.
“En este momento es un proceso legal, con vacíos de ley… En este caso, las clínicas se contactan con las personas que quieren hacer el proceso con todo el conocimiento y de una manera voluntaria. Luego, se hacen una serie de exámenes para constatar que la persona psicológicamente y de salud esté apta para hacerlo”.
Asegura no cualquier mujer puede ser candidata. Uno de los requisitos es que las mujeres hayan tenido hijos antes sin problemas, que no fumen ni beban alcohol y que tengan cédula colombiana. Además, solo aceptan mujeres entre los 20 y 38 años, que tengan un peso saludable y estén dispuestas a estar controladas durante todo el proceso.
“Yo me enteré por medio de una publicación de Facebook, ahí decía la posibilidad de ser madre subrogada. Ustedes hablan de alquiler de vientre, nosotros no lo llamamos así, porque además es un proceso altruista, es darle la posibilidad a una familia que quieren ser padres y no han podido, de hacerlo de forma natural”, cuenta Sandra.
La mujer, de 37 años, cuenta que es madre de un hijo, sin pareja, “yo soy independiente, tengo una empresa, también estudio y decidí hacerlo… Cuando uno inicia tiene que tener claro que es un proceso voluntario (...) Es un proceso totalmente diferente, son bebés trauidos con mucha intención y amor, entonces da mucha satisfacción”.
En relación al tema legal, cuenta que firmó un contrato en donde le brindaron afiliación a la EPS y donde las dos partes adquieren una serie de compromisos, como atención psicológica y manutención mensual.
“Nosotras después de terminar el proceso psicológico y médico, tenemos la posibilidad de tener una entrevista con los padres intencionales, podemos hablar con ellos y que nos cuenten de su propósito, porqué quieren tener hijos, les podemos preguntar lo que queremos y ellos igual”, narra Sandra.
Y agrega, “yo puedo decir desde mi propia experiencia, que cuando los niños se quedan con sus papas, siente uno plena tranquilidad, paz, alegría y uno ve que las personas que gestan, son personas excelentes, que es un niño completamente deseado”.
Para más información escuche la entrevista completa.