Qatar 2022: conozca las lesiones más comunes que sufren los jugadores de fútbol

La fiesta mundialista apenas empieza y a pesar de las polémicas que rodean a Qatar como sede del torneo futbolístico más importante del mundo, la ilusión que tienen los hinchas y jugadores para levantar la copa del mundo sigue intacta. No obstante, cada compromiso supone un riesgo de lesión para los deportistas.

Las más comunes se presentan en las extremidades inferiores: las distensiones y los esguinces son las más frecuentes, con gravedad variante dependiendo de lo que haya pasado.

La velocidad, la potencia, los saltos y los exigentes cambios de dirección durante el juego, obligan a los futbolistas a absorber cargas de alto impacto, especialmente en las rodillas, los pies y la pelvis.

Esguince

Es una lesión que afecta los ligamentos, que son estructuras sólidas, elásticas y poco deformables que unen a los huesos entre sí en el seno de una articulación y cuya función es restringir y dirigir su movimiento.

Las más habituales se presentan en el tobillo y la rodilla, y se producen a partir de una torsión o estiramiento brusco del ligamento que supera su capacidad de elasticidad.

Normalmente se produce por una torcedura, cuando la planta del pie mira hacia adentro y el empeine hacia afuera. Los esguinces pueden tener tres grados, y dependiendo de cuál de ellos estemos hablando, la recuperación variará.

N’Golo Kanté, jugador del Chelsea de Inglaterra, volante referente de los franceses, y campeón del mundo en 2018, se perdió el torneo por una lesión en el tendón de la corva,que puede ocurrir por estiramiento excesivo y súbito. En el fútbol, este tipo de lesiones representa el 13 a 17% de las lesiones agudas.

Rotura muscular

Esta es la lesión por excelencia de los futbolistas. Se estima que las roturas musculares representan entre un 30% o 40% del total de lesiones en este deporte. Se produce cuando un músculo o un tendón (el tejido resistente que une el músculo con el hueso) se estira demasiado o se rompe.

Se produce por una sobrecarga cuando el músculo es sometido a un exceso de trabajo. Si bien puede ocurrir en cualquier músculo, la rotura más frecuente es la de los isquiotibiales. Los fisioterapeutas tienen una labor importantísima en la recuperación de este tipo de lesiones.

Pulbalgia

Al igual que otro tipo de lesiones, la pubalgia presenta un origen traumático, como resultado de una caída o un salto incorrecto, por ejemplo, que genera una tracción en los aductores. Los movimientos repetitivos y continuos, como el golpe del balón, las caídas descompensadas y los cambios de velocidad, también pueden desencadenar en este tipo de lesión.

La pubalgia tiene los síntomas localizados alrededor de la pelvis con dolor irradiado hacia los aductores, abdominales y arcos crurales y se clasifica en alta, baja o mixta dependiendo de los músculos a los que afecte.

Ruptura de ligamento cruzado

El ligamento cruzado anterior, uno de los cuatro de la rodilla, es el que más suele romperse con más facilidad, por un estiramiento excesivo o un golpe y se debe operar para reconstruirlo. El proceso de recuperación es duro, largo y el deportista necesita entre 6 a 8 meses de recuperación para la vuelta a su actividad previa a la lesión.

Pero si hay algo que de verdad temen los futbolistas, es la denominada “tríada”. Se trata de tres lesiones en una, y ocurre cuando se rompen a la vez el ligamento cruzado anterior, el ligamento lateral interno y el menisco interno.

Paúl Pogba, referente de la selección francesa, no pudo asistir a Qatar 2022, luego que se lesionó la rodilla derecha durante la pretemporada con su nuevo club, la Juventus de Turín. El deportista se sometió a una operación en septiembre.

Así mismo, Reece James será otro que no estará con su selección. El jugador del Chelsea sufrió una lesión de rodilla mientras disputaba el partido por la Champions League contra el AC Milan. El departamento médico del club comunicó que el defensor estará por fuera ocho semanas y se someterá a diferentes fases de rehabilitación.

Rotura del tendón de Aquiles.

El tendón de Aquiles es el más potente del cuerpo, sin embargo constituye un punto débil para muchos deportistas. Su función es la de levantar el talón del suelo durante la marcha y cuando saltamos de manera sucesiva, llega a soportar 12,5 veces el peso de nuestro cuerpo.

El tratamiento para la rotura en un deportista pasa por la cirugía y tras ella, la recuperación suele durar entre 4 y 6 meses.