<strong>Boris Johnson</strong> se dispone a lograr lo que durante mucho tiempo pareció imposible. Tras años de divisiones, los <strong>diputados británicos</strong> deben aprobar este jueves, en una votación histórica, <strong>el acuerdo para sacar al Reino Unido de la Unión Europea el 31 de enero.</strong>El texto, inicialmente <strong>negociado por la anterior primera ministra, Theresa May</strong>, y modificado por Johnson tras su llegada al poder en julio, había sido reiteradamente rechazado por el Parlamento,<strong> obligando a tres aplazamientos y provocando una profunda crisis política.</strong>Pero ahora, gracias a <strong>la aplastante mayoría que el líder conservador logró en las legislativas anticipadas de diciembre</strong>, el proyecto de ley que traduce a la legislación británica el acuerdo de divorcio con Bruselas<strong> debe ser aprobado sin dificultades.</strong>Tras <strong>tres días de desapasionado examen legislativo</strong>, que contrastan con los acalorados debates que durante años jalonaron un proceso caótico en una cámara dividida entre partidarios y detractores del Brexit,<strong> los diputados adoptarán el texto en una votación no menos histórica por ser absolutamente previsible.</strong>Así, el 31 de enero a las 23h00 (locales y GMT), tres años y medio después del referéndum de 2016 en que <strong>52% de británicos</strong> votó por el Brexit, el Reino Unido <strong>pondrá fin a 47 años de complicada relación con la UE.</strong>Y <strong>el bloque, por primera vez desde su creación, perderá un país miembro</strong> y ganará un poderoso competidor comercial y financiero a sus puertas.El texto recoge entre otras cuestiones los derechos de los ciudadanos europeos en el Reino Unido y los británicos en la UE, <strong>la factura -de unos 39.000 millones de libras- que Londres deberá pagar para honrar sus compromisos financieros con el bloque</strong> y el modo de mantener abierta la frontera terrestre en la isla de Irlanda.Tras el Brexit, Londres y Bruselas emprenderán una segunda, y más complicada, <strong>fase de negociación, la de su futura relación.</strong><strong>Johnson prometió concluirla antes de finales de año</strong> para no tener que ampliar el periodo de transición."Después de haber esperado más de tres años para realizar el Brexit, los ciudadanos británicos y europeos esperan con razón que las negociaciones <strong>sobre un ambicioso acuerdo de libre comercio terminen a tiempo</strong>", le dijo el miércoles a la <strong>nueva presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.</strong>Esta, que viajó por primera vez a Londres tras asumir el cargo en diciembre, dejó sin embargo claro que<strong> el tiempo es insuficiente para alcanzar un acuerdo completo de libre comercio.</strong>"Tenemos duras conversaciones por delante y cada lado hará lo que sea mejor para él", dijo. Y advirtió de que <strong>Londres podría perder su acceso al mercado europeo</strong> si insiste en concluirlas antes de finales de año.