Con crisis económica pero con mucha seguridad, Argentina recibe al G20
Se trata del evento internacional más grande organizado por ese país bajo el gobierno de Mauricio Macri.
Argentina
La cumbre del G20 en la que participarán los más importantes líderes mundiales representa un desafío para Argentina que debe garantizar la seguridad con estrictas medidas internacionales. El país vive además un momento de tensión luego de los incidentes presentados durante la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors.
Esta reunión se celebra apenas meses después de que Argentina vivió una nueva preocupación económica que llevó al gobierno de Mauricio Macri a pedir un crédito adicional al Fondo Monetario Internacional.
Según analistas el 2018 fue el año más complicado de su gobierno con amplias protestas sindicales, la devaluación del peso frente al dólar, un aumento de la pobreza y desempleo y previsiones de contracción económica. Esos factores representaron un problema para Macri, quien esperaba presentar durante la cumbre su política de reformas graduales.
A pesar de los problemas económicos, Argentina demostrará un gran despliegue de seguridad para garantizar que no hay incidentes, pues además se esperan protestas mayores que las de Hamburgo en 2017.
Buenos Aires es una ciudad blindada, desplegará 24.000 agentes de seguridad y hay zonas completamente restringidas. También hay interrupciones en el sistema de trenes y de metro.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, incluso pidió a los habitantes que si es posible salgan de la ciudad durante los días de la cumbre. El viernes 30 de noviembre fue decretado como feriado no laboral en la ciudad y no operarán distintos servicios.
La seguridad estará reforzada con 2.000 agentes que traerán las delegaciones extranjeras y solo funcionará el Aeropuerto Internacional de Ezeiza.