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En Colombia hay libertad religiosa, pero no igualdad: obispo ortodoxo

Sostuvo que la Constitución de 1991 abrió espacios, pero normas posteriores han generado confusión.

En Colombia hay libertad de cultos, pero no hay una reglamentación clara, lo que genera desigualdad del Estado frente a algunas iglesias o credos, afirmó el obispo Francisco Duque, de la Iglesia Anglicana y miembro del Consejo Evangélico

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En entrevista con Caracol Radio sostuvo que fundamentalmente la Constitución de 1991 abrió los espacios para la libertad religiosa, concretamente en el artículo 19, el cual señala: “Se garantiza la libertad de cultos. Toda persona tiene derecho a profesar libremente su religión y a difundirla en forma individual o colectiva. Todas las confesiones religiosas e iglesias son igualmente libres ante la ley”

El obispo Duque anotó que este artículo fue un avance importante hacia la multirreligiosidad, pues las iglesias pueden tener un registro especial en el ministerio del Interior y con una ley de 1998, se les reconoció con la entrega de personerías jurídicas especiales, tema que sin embargo, dijo “no ha tenido suficiente control”

Añadió que posteriormente, durante la gestión de Sabas Pretelt en el Ministerio del Interior y de Justicia, se expidió un decreto que generó confusión, porque desde entonces basta con llenar unos requisitos para obtener personería jurídica, pero no abre la posibilidad de que algunas personas la obtengan con fines no propiamente religiosos

Anotó que “en Colombia tenemos libertad religiosa, pero el problema está en la igualdad. No ha habido interés político para que haya igualdad de los credos frente a la ley”

En similar sentido se pronunció Edgar Castaño, pastor de la Iglesia Bautista y presidente de la Federación Consejo Evangélico de Colombia

Según Castaño, los representantes de los credos religiosos tienen conversaciones con el Ministerio del Interior tendientes a crear una subdirección de asuntos religiosos que preste más atención a sus necesidades

“La religión hace parte de una cultura y necesitamos más atención y respuesta a las necesidades de las iglesias”, enfatizó Castaño en entrevista con Caracol Radio. La Federación que preside agrupa a 230 organizaciones religiosas que representan unos 7 millones de fieles

Añadió que desde la proyectada subdirección de asuntos religiosos se podrá abordar muchas cosas importantes para la religión, entre ellas el surgimiento de nuevos credos o comunidades, que generalmente son tildadas como “iglesias de garaje”, pero que en muchos casos sí tienen fines honestos. “En vez de iglesias de garaje las debemos llamar iglesias domésticas, porque empieza pequeñas, con unas cuantas personas, y poco a poco se van desarrollando”

En ese sentido, insistió en que no todas las iglesias pequeñas buscan estafar a las gentes, sino impulsar sus creencias y principios, que en ocasiones no son los mismos de las iglesias más grandes y más ampliamente establecidas

Anotó que con la proyectada subdirección también se pueden “poner sobre la mesa temas específicos como el aborto, matrimonio homosexual y muchos otros que en este momento no se atienden, porque no hay sino una oficina que se dedica solo a dar personerías jurídicas”.