Circunscripciones especiales de paz, un debate que apenas comienza

Un congresista de la Comisión de Paz, un exguerrillero y un analista de temas de paz señalaron que las circunscripciones especiales de paz, propuestos en el acuerdo logrado en Cuba, es válido y era uno de los puntos más álgidos en la mesa de negociación

El representante Liberal de la Comisión de paz, Joaquín Camelo del partido liberal dijo que la paz requiere decisiones por impopulares que parezcan y el apoyo general, al tiempo que destacó que hay una importante tendencia a entender que la decisión, en caso de cristalizarse, es una apertura a la democracia

“Yo creo que esta es una oportunidad importante para que esos sectores excluidos tengan una igualdad de oportunidades, como la tradición política de este país lo ha tenido. Me parece que es la oportunidad para que sectores importantes, como las mujeres, indígenas, campesinos, afrodecendintes tengan la oportunidad de hacer más visible la participación en la política”, señaló el congresista

Explicó que las negociaciones de paz, no son la verdadera resolución del conflicto social en el país, “es apenas la salida de una guerra entre las fuerzas del Estado y la guerrilla de las Farc”

Para Antonio Sanguino, copresidente de la Alianza Verde, el segundo punto del acuerdo de la Habana y el acuerdo que se logró es la oportunidad para que las Farc cambien las armas por los votos

“Eso no solo ha ocurrido en Colombia, ha ocurrido en todas las partes del mundo donde existen conflictos políticos armados como el caso colombiano. El frente Farabundo Martí de Liberación Nacional, que hoy gobierno el Salvador, fue una organización guerrillera que hizo un acuerdo de paz para pasar de la lucha armada a la lucha política y en el cono sur las organizaciones armadas que se levantaron contra las dictaduras; hoy por ejemplo el presidente José Mujica de Uruguay viene de la lucha armada”, manifestó el dirigente político

Ariel Avila, investigador de la Fundación Paz y Reconciliación, destacó cuatro puntos fundamentales que se concluyen luego de la negociación de dos puntos de la agenda de diálogos en La Habana (Cuba)

“Uno, que esto no es una nueva norma constitucional, eso la Constitución lo permite; dos, que las Farc entrarían a competir; tres, que es una deuda histórica que hay con esta población que vive en esas zonas del país, es la reparación a esta población que ha sido excluida, y cuatro; si el costo es permitir que las Farc participen en política, es un costo barato para la democracia”, afirmó el analista

Es importante tener en cuenta una encuesta del Observatorio de Democracia de la Universidad de los Andes, en la cual se le pregunto a más de mil personas en el país sobre el proceso de paz si pensando en una posible desmovilización de las Farc cuán sería su actitud para que los desmovilizados del grupo armado ilegal puedan alcanzar sus objetivos políticos; y quienes habitan en las zonas altas de conflicto un 15.5% apoyan esta iniciativa, mientras que un 61.2 % a nivel nacional lo desaprueba

Según Ariel Ávila, ese 15.5 % “representa a la población que generalmente no vota, población que vive en bombardeos, población que no ha participado en política, entonces, las circunscripciones especiales no son para las Farc, son para unos territorios especiales que han sido históricamente afectados por el conflicto armado”

La Constitución señala sobre las circunscripciones especiales que “la ley podrá establecer una circunscripción especial para asegurar la participación en la Cámara de Representantes de los grupos étnicos y de las minorías políticas. Mediante esta circunscripción se podrán elegir hasta cuatro representantes.