"No me pueden pedir que me quede callado frente al proceso de paz": procurador Ordóñez
El procurador aseguró que el país debe distinguir que "una cosa es perdón y olvido y otra muy diferente la impunidad".
El procurador general de la nación, Alejandro Ordóñez, aseguró que el país debe distinguir en el proceso de paz que se adelanta en La Habana con la guerrilla de las Farc que una cosa es perdón y olvido y otra muy diferente la impunidad
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"Se puede discutir hasta el lugar de reclusión y otros aspectos, pero como procurador no puedo admitir que se me pueda pedir que me quede callado. Yo no lo puedo hacer, no me callo para que las víctimas queden sacrificadas en el altar de la impunidad", afirmó durante un encuentro con los diputados del Valle y la firma de un acuerdo por la transparencia con la Gobernación del Departamento
"Escuché a uno de los comandantes en La Habana pidiendo de manera equivalente los indultos y amnistías para los responsables de los falsos positivos, pues tampoco, ni allá ni acá, hablemos sí de penas alternativas aquí y allá, de reducción de penas, pero de impunidad jamás, ratificó
El procurador general de la nación advirtió que se propone, si es necesario, acudir a los organismos internacionales para que determinen si el marco para la paz responde a los estándares internacionales que han sido diseñados por esos mismos organismos para otros hechos y procesos similares
"No podría tener una posición diferente en mis roles y competencias constitucionales. A mí me corresponde advertir de los riesgos que corre el país, porque no estamos en un escenario jurídico de los años noventa", afirmó
El representante del Ministerio Público recordó que cuando se establecieron penas alternativas de cinco y ocho años para los responsables de diferentes delitos la Comisionada de Naciones para los Derechos Humanos, dijo que era inadmisible penas tan bajas para sancionar esos delitos y que las penas debían ser adecuadas a la gravedad de la falta, “pero hoy en día ni siquiera eso. Ni un día de cárcel para por ejemplo los secuestradores de los doce diputados del Valle, ni para los genocidas de Bojayá y ahora pasarán de La Habana a diseñar nuestra Institucionalidad”.